¿Has estado teniendo una conversación bastante fluida con tu cliente cuando de pronto te ghosteó y te dejó de responder? Sin duda sabemos que ese momento puede ser incómodo y hasta bochornoso porque pone una barrera imaginaria para volvernos a acercar; prácticamente nos deja con esa sensación de “si te acercas, vas a ser molesto e inoportuno”.
Hay algunas formas asertivas para volver a hacer un acercamiento pasado algún tiempo. Toma nota:
- Después de 24 horas
NO: “¿Pudiste ver mi mensaje?”.
SÍ: “Hola (nombre), quiero asegurarme de que recibiste la información. ¿Crees que la solución se adapta a tu necesidad?”.
- Después de 48 horas
NO: “¡Aún no me respondes! ¿Sigues interesado?”.
SÍ: “Hola (nombre), imagino que tienes una agenda ocupada, realmente quiero ayudarte con (dolor o necesidad), ¿me podrías compartir por favor tu horario disponible? Gracias”.
- Mensaje final
NO: “Si no me respondes, asumiré que mi propuesta no te interesa”.
SÍ: “Espero que estés bien. Quería hacer un último seguimiento respecto a (proyecto/servicio), ya que no he tenido noticias tuyas últimamente. Entiendo que quizás tus prioridades hayan cambiado o que el momento no sea el ideal, y por supuesto, respeto totalmente cualquier decisión.
Mi objetivo siempre es aportar valor y ayudarte a lograr tus metas, así que, si en el futuro consideras que puedo apoyarte en algo, estaré encantado de retomar la conversación.
Quedo a tu disposición y te envío un cordial saludo”.
Recuerda, ante todo está la educación y la asertividad. Si la otra persona no está siendo educada dando una respuesta, tú sí.