Consejos esenciales para hacer entrevistas en radio y pódcast

Una cosa es recibir la llamada de un oyente y conversar con él, y otra cosa es entrevistar a una celebridad o a algún especialista invitado a un programa de radio o pódcast.

Y aunque es normal que la forma de realizar entrevistas se va perfeccionando con el tiempo, especialmente si el locutor, conductor, presentador o podcaster no ha estudiado comunicación social y trabaja de forma empírica, es posible acelerar ese proceso usando las técnicas adecuadas.

Y de eso se trata mi artículo de hoy. La idea es ayudarles a desarrollar sus habilidades de entrevistador, de forma que el entrevistado se sienta cómodo y pueda entregar toda la información que se le pide, y que el oyente se quede pegado, no se aburra y, por el contrario, se sienta partícipe de la conversación.

Para comenzar, recordemos que el objetivo de una entrevista es proporcionar, en las propias palabras del entrevistado, hechos, razones u opiniones sobre un tema en particular para que el oyente pueda formarse una conclusión sobre la validez de lo que se está diciendo.

Por otro lado, es clave tener en cuenta que la entrevista debe ser esencialmente un evento espontáneo, es decir, que cualquier indicio de que ha sido ensayada con anterioridad daña la credibilidad del entrevistado hasta el punto de que el oyente crea que todo está «arreglado».

Por esta razón, aunque el tema puede discutirse de manera general antes, las preguntas reales no deben proporcionarse con antelación.

Tipos de entrevistas

En general, podríamos dividir en tres los tipos de entrevistas que se realizan habitualmente:

1. Entrevista informativa: Se hace para impartir información al oyente. La secuencia en la que esto se hace es importante si lo que se busca es que los detalles queden claros.

Algunos ejemplos: los preparativos para el concierto de determinado artista. La acción que rodea a una operación militar. Los eventos y la propuesta contenida en el nuevo plan de desarrollo de la ciudad.

2. La entrevista interpretativa: El entrevistador suministra los hechos y pide al entrevistado que comente sobre ellos o que los explique. El objetivo es exponer el razonamiento detrás de las decisiones y permitir que el oyente juzgue sobre el sentido implícito de valores y prioridades.

Ejemplos en esta categoría serían el organizador del concierto explicando por qué se escogió determinado recinto para realizarlo, un ministro del gobierno que da las razones de una política económica ya publicada, o por qué el concejo local ha decidido una ruta particular para una nueva carretera.

3. La entrevista emocional: Se hace con el fin de proporcionar una visión del estado mental del entrevistado, de forma que el oyente pueda entender mejor lo que implica en términos humanos.

Ejemplos específicos serían las reacciones de los fanáticos de un artista al verlo ingresar al recinto, los sentimientos de los familiares de personas atrapadas en los escombros de un terremoto o el momento de logro supremo para un atleta o un artista exitoso.

Componentes

Existen 4 elementos indispensables para la realización de una entrevista:

1. Entrevistador: El control de una entrevista está completamente en manos del entrevistador. Una entrevista se considera exitosa cuando el entrevistador puede cumplir el propósito de la entrevista de manera simple y eficiente.
2. Entrevistado: El entrevistado es el personaje central en una entrevista. Una pregunta para el entrevistado debe ser relevante para su campo. Si el público no tiene suficiente confianza en el entrevistado, entonces las palabras que diga serán consideradas como propaganda, lo que mata el objetivo principal de la entrevista.
3. Objetivo y contexto: En una entrevista, el entrevistado no debe empezar a hablar de manera libre, sino que debe ser dirigido por el entrevistador. No se trata de hablar por hablar. Y, para dirigir la historia, debe haber un objetivo definido. Cada entrevista tiene un cierto contexto, y el entrevistador debe entender el contexto y tratar de alcanzar el objetivo.
4. Las preguntas: Para contar una historia a través de una entrevista, las preguntas son imprescindibles. Un entrevistador investiga los elementos de una historia con la ayuda de una pregunta. La secuencia de preguntas determina la secuencia de la historia. Por lo tanto, las preguntas relevantes y su secuencia son extremadamente importantes.

¿Qué debe saber el entrevistado?

Antes de comenzar una entrevista, previamente hay que darle a conocer algunos elementos básicos, de forma que no solo se sienta más tranquilo, sino que tenga un mejor enfoque sobre lo que se va a hablar e incluso pueda manejar mejor su tiempo.

Estos elementos son:

• ¿De qué se trata? No las preguntas exactas, pero sí las áreas generales y los límites del tema.
• ¿Se transmitirá en vivo o grabado?
• ¿Cuánto durará?
• ¿Cuál es el contexto? ¿Es la entrevista parte de un tratamiento más amplio del tema con aportaciones de otros o un solo elemento en un programa de noticias o revistas?
• ¿Para qué audiencia?
• ¿Dónde? ¿En el estudio o en otro lugar?
• ¿Cuándo? ¿Cuánto tiempo hay para la preparación?

Consejos para entrevistas en radio

Hay dos posibles formas de realizar una entrevista, en el estudio o por teléfono o por cualquier plataforma de audio y video.

Cuando la va a hacer en cabina:

• Investigue antecedentes del personaje y del tema a tratar.
• Programe la entrevista con los elementos básicos. Por ejemplo: Introducción, conclusión, preguntas, etc. Mantenga una libreta y tome notas.
• Acepte lo que diga el invitado si es necesario y pida explicaciones cuando algo no esté claro.
• Observe a la persona con atención.
• Sea justo.
• Relájese.

Cuando la va a hacer por alguna plataforma de audio o video:

• Preséntese.
• Hable despacio y claramente.
• Haga afirmaciones que pongan al invitado a gusto.
• Haga preguntas breves.
• Dé al entrevistado suficiente tiempo para responder.
• No hable al mismo tiempo.

Cinco acciones de siempre debe hacer

Tenga en cuenta los siguientes consejos para que su entrevista se sienta más profesional:

• Siéntese cerca del micrófono.
• Busque conexión con el entrevistado.
• No espere a que él dé el primer paso.
• Trate de manera respetuosa a los invitados, por muy irreverentes que sean.
• Escuche la grabación para entender qué salió bien y qué puede mejorar.

Cinco acciones que siempre debe evitar

• Evite las respuestas demasiado largas.
• Evite respuestas complejas.
• Evite personajes, temas y conversaciones aburridas.
• Evite personajes que no tienen sentido del humor.
• Evite personajes que solo buscan crear alarma o negatividad.

Elementos esenciales de una buena entrevista

Hay 6 elementos tradicionales que se deben tener en cuenta para realizar una buena entrevista. Estos seis elementos se conocen en inglés como Who, What, When, Where, Why y How (Quién, Qué, Cuándo, Dónde, Por qué y Cómo), y fueron definidos por primera vez por Rudyard Kipling.

En su poema «The Elephant’s Child», de su libro «Just So Stories» de 1902, Kipling utiliza estos interrogantes en una estrofa que dice:

«Tengo seis sirvientes honestos (ellos me enseñaron todo lo que sé); sus nombres son Qué, Por qué, Cuándo, Cómo, Dónde y Quién».

Esta mención ha llevado a que estos seis interrogantes sean conocidos como «Las seis preguntas de Kipling» y son ampliamente utilizados en periodismo y en la estructuración de entrevistas para asegurar que toda la información relevante sea cubierta.

Por eso, esos 6 elementos son claves al momento de hacer una buena entrevista.

Y es que una entrevista es una conversación con un objetivo. Por un lado, el entrevistador sabe cuál es ese objetivo y sabe algo sobre el tema. Por otro lado, al ponerse en los zapatos del oyente, está pidiendo descubrir más.

• El elemento ¿Quién? pregunta por hechos. La respuesta es una persona.
• El elemento ¿Cuándo? También pregunta por hechos, pero responde por un momento en particular.
• El elemento ¿Dónde? También pregunta por hechos, diciendo dónde ocurrió el acontecimiento.
• El elemento ¿Qué? pregunta por hechos o una interpretación de hechos y entrega una secuencia de eventos.
• El elemento ¿Por qué? pregunta por opinión o razón para una acción.
• El elemento ¿Cómo? pregunta por hechos o una interpretación de hechos y también entrega una secuencia de eventos.

Un par de ejemplos del uso de estos elementos podrían ser:

• ¿Cómo se siente acerca de…? ¿Cómo fue que llegó a eso? ¿Dónde ocurrieron los hechos? ¿Quién hizo tal afirmación?
• Pero la mejor de todas las preguntas, y que muchas veces es la que menos se hace, es ¿por qué? De hecho, después de cualquier respuesta, este ¿Por qué? puede ser suficiente para no seguir profundizando en el tema.

Durante la entrevista:

El entrevistador debe estar activamente en control de cuatro funciones separadas:

• Aspectos técnicos. Los aspectos técnicos deben ser monitoreados constantemente. ¿Está cambiando el ruido de fondo, por lo que requiere un cambio en la posición del micrófono?

• Dirección de la entrevista: el objetivo siempre debe tenerse en cuenta. ¿Se está cubriendo el tema en términos de las preguntas clave decididas de antemano?
• Preguntas suplementarias. Es vital que el entrevistador no esté tan preocupado por la próxima pregunta como para no escuchar lo que dice el entrevistado. La habilidad para escuchar lo que dice el entrevistado.

• Manejo del tiempo. El tiempo de la entrevista debe ajustarse estrictamente a lo planeado.

Al terminar la entrevista

La palabra ‘finalmente’ solo debe usarse una vez, cuando realmente va a parar la conversación.

Y para prevenirlo, puede ser útil, antes de hacer la última pregunta y como una señal para que se dé cuenta de que el tiempo se está agotando, hacer una pregunta de advertencia y que se está llegando al final. Ejemplos:

• ‘Brevemente, explique por qué…’
• ‘En una palabra, dígame cómo…’
• ‘En su forma más simple, qué…’

Es muy importante avisarle con anticipación al entrevistado de cuánto tiempo se dispone o por cuánto tiempo se tiene planeada la entrevista, para no generar falsa expectativas y para que sepa cómo medir el tiempo en sus respuestas.

Y, al final, una forma positiva para terminar, y evitando alargar la conversación es simplemente agradecer al entrevistado por participar: «Sr. Pérez, muchas gracias».

Después de la entrevista

El entrevistador debe sentir que su conversación y los datos que entregó sirvieron para esclarecer el tema, y que ha proporcionado una contribución a la comprensión y apreciación del tema por parte de los oyentes.

Si se trata de una entrevista grabada, es imperativo verificar inmediatamente que quedó bien reproduciendo los últimos 15 segundos aproximadamente.

Conclusión

Hago la última advertencia porque me pasó un par de veces que pensé que la grabación había quedado bien, y resultó que al escuchar el audio estaba totalmente en blanco.

Lo que he descrito se resume en una serie de detalles que se deben tener en cuenta y que nos muestran que una entrevista no debe tratarse de una simple conversación si se quiere lograr el objetivo.

Por el contrario, se requiere de planeación, paciencia, empatía con el entrevistado, conocimiento del tema y un buen manejo del tiempo para mantener enganchado al oyente.

¡Suerte con su próxima entrevista!