Un terreno pantanoso.
Los comerciales en Estados Unidos están más allá de la creatividad y el tiempo de duración; deben contar con ciertos estándares muy particulares e información verídica. Poner testimonios como gancho de compra puede ser una idea muy mala.
Por si no lo sabías, presentar incluso testimonios honestos de clientes reales puede violar las regulaciones de la Federal Trade Commission.
La FTC dice:
Los testimonios de los consumidores sobre el rendimiento de un producto o servicio anunciado se interpretarán como que representan que el producto o servicio es efectivo para el propósito descrito en el anuncio. Por lo tanto, el anunciante debe poseer y contar con una justificación adecuada, que incluya, cuando corresponda, evidencia científica competente y confiable para respaldar tales afirmaciones realizadas a través de testimonios, de la misma manera que el anunciante debería hacerlo si hubiera hecho la representación directamente, es decir, sin usar endosos. Los endosos del consumidor en sí mismos no son evidencia científica competente y confiable.
¿A dónde queremos llegar con este tema?
Primero que nada, debemos entender que, si alguien va a respaldar nuestra palabra, necesitamos de un experto que pueda comprobarlo. Suena rebuscado, pero tiene sentido.
¿Cómo es posible comprobar la palabra de una persona al azar que habla durante un comercial? Por esa razón, en algunos lugares como en México son necesarios los notarios para comprobar la legitimidad de cada hecho.
Por eso, durante los procesos creativos, es necesario que la gente brinde opiniones sobre el producto y la experiencia usándolo. De no hacer esto, podrías enfrentar una lamentable multa.
Tal vez no es el mensaje que buscas, sin embargo, es lo más legal.
Fuente: Dan O’ Day