¿Cuántas veces hemos escuchado que se cancela un concierto porque el cantante tenía gripa, un resfriado o un problema de garganta? ¿Se ha preguntado por qué hay locutores que se enferman de la garganta y vías respiratorias con frecuencia?
Los micrófonos pueden ser un caldo de cultivo para las bacterias. Un micrófono se usa frente a la boca. Recibe escupas, estornudos y el aire y las partículas que salen de nuestra boca.
Los gérmenes y virus que quedan en un micrófono pueden permanecer infecciosos por 48 horas o más, según la cantidad de humedad presente en la malla protectora, en la espuma o en el filtro anti pop y la antigüedad de esos elementos.
Según la prestigiosa Clínica Mayo, el tiempo que los virus del resfriado y la gripa pueden sobrevivir fuera del cuerpo en una superficie ambiental varía mucho, pero se cree que el rango va desde unos pocos segundos hasta 48 horas, dependiendo del virus específico y el tipo de superficie.
Los virus de la gripa tienden a vivir más tiempo en las superficies que los virus del resfriado. Además, generalmente se cree que los virus del resfriado y la gripa sobreviven durante períodos más largos en superficies no porosas -como plástico, metal o madera- que en superficies porosas, como tela o papel.
Aunque los virus del resfriado y la gripa se transmiten principalmente por contacto de persona a persona, también pueden propagarse por contacto con objetos o superficies contaminadas.
La mejor manera de evitar infectarse con el virus del resfriado o la gripe es lavarse las manos con frecuencia con agua y jabón o con un desinfectante para manos a base de alcohol.
Todo lo anterior nos lleva a preguntarnos cuál es la mejor manera de limpiar nuestros micrófonos y todos los elementos relacionados, especialmente en momentos en los que, como es sabido, la pandemia del coronavirus no ha terminado.
Advierto de entrada que no soy un experto virólogo y que lo que presento a continuación proviene de experiencias personales de trabajo y de diferentes fuentes consultadas. Sin embargo, me parece importante sugerir algunas medidas prácticas que puedan ayudar a protegerlo a usted y a la gente que trabaja con usted.
¿Existe la posibilidad de que el virus se propague a través de un micrófono?
Cuando hablamos, pequeñas gotas de líquido salen de nuestra boca junto con el aire que exhalamos. Esas pequeñas gotas de saliva pueden acumularse dentro y sobre la malla de un micrófono, especialmente cuando se habla muy de cerca.
Aunque no es muy probable que estas gotas salgan de la malla protectora, existe la posibilidad de que la próxima persona que lo use la toque con los labios, y si estuviera contaminado, el virus podría entrar en su cuerpo.
El virus también puede transmitirse cuando reemplaza una malla parabrisas y no observa las medidas de higiene necesarias. Si toca una malla recién usada y luego se toca la cara, puede contraer una infección.
La higiene personal también juega un papel importante para mantener los micrófonos limpios, y por higiene no me refiero a cepillarse los dientes o al aseo personal. Como dije arriba, lavarse las manos regularmente es una de las formas más simples y efectivas de reducir la propagación de bacterias a través de las cosas que uno toca.
Por esto es imperativo asegurarse de que sus manos estén limpias y lavarlas minuciosamente jabón regular durante un mínimo de 20 segundos antes de proceder a tocar sus micrófonos o grabar con ellos.
Mantener limpios los micrófonos de mano es crucial
Es posible que los micrófonos de estudio y de condensador no se acerquen tanto a las manos y los labios como un micrófono de mano. No obstante, es importante asegurarse de que obtengan una buena limpieza entre sesiones.
Por su parte, los micrófonos de mano se pueden desinfectar limpiándolos completamente con alcohol isopropílico, isopropanol u otros agentes desinfectantes. Las áreas importantes por cubrir son el cuerpo del micrófono y la malla protectora, donde los labios pueden entrar en contacto.
También puede dejar que sus micrófonos se sequen con luz ultravioleta o al sol durante un máximo de 72 horas, ya que la mayoría de las bacterias en las superficies de acero y plástico morirán dentro de este período de tiempo; la radiación ultravioleta ayuda en este proceso.
¿Cuál es la mejor manera de desinfectar las superficies de los dispositivos?
Lavar a mano la malla a temperaturas más bajas con un detergente desengrasante debería ser eficaz contra la capa de grasa del virus, y es probable que no dañe ningún logotipo impreso.
La forma más efectiva de limpiarlos es enjuagarlos con agua tibia y jabón y dejarlos secar durante un mínimo de 72 horas.
La Organización Mundial de la Salud recomienda varios desinfectantes a base de alcohol, especialmente para evitar contagio de coronavirus. El etanol y el alcohol isopropílico son buenas opciones, pero antes de aplicar alguna de estas opciones, haga una prueba antes de aplicarlo a toda la superficie del micrófono.
Alternativamente, quienes buscan formas más extremas de desinfectar las espumas pueden hacerlo con una máquina de vapor eléctrica que mate cualquier bacteria incrustada entre los poros gracias al calor que sople por la boquilla (sea generoso en la aplicación de vapor y revíselo varias veces).
¿Ayuda un tratamiento térmico?
No se recomienda un tratamiento térmico regular de los micrófonos, transmisores o receptores. Por lo general, estos dispositivos son seguros a temperaturas de hasta 55 grados centígrados. Durante períodos breves, también pueden soportar temperaturas más altas.
Algunos «hornean» sus micrófonos, ya que el calor también puede ayudar a combatir las bacterias que pueden vivir en las superficies. Se ha sugerido que uno puede hornear un micrófono en el horno a 70 grados durante 3 minutos y que las bacterias en todas sus superficies morirán en este proceso.
Sin embargo, hay que tener mucho cuidado al meter un micrófono en un horno, ya que podría provocar el deterioro no solo de algunas cualidades estéticas, sino que también podría dañar algunas cosas funcionales si no se hace correctamente.
Tenga en cuenta que muchas de las parrillas protectoras suelen estar hechas de espuma de poliuretano. Este material es resistente a una temperatura de hasta 100 grados centígrados.
Sin embargo, tenga en cuenta que un lavado a 90 grados centígrados puede causar un estrés mecánico y químico considerable, lo que probablemente dañe los logotipos impresos en las mallas.
¿Se puede usar una bolsa de plástico como protector desechable para el micrófono?
A pesar del deterioro en la calidad del audio, muchos usuarios ahora cubren la malla de su micrófono con bolsas de plástico impermeables para evitar tener que limpiarlo después de cada uso. Estas bolsas de plástico deben reemplazarse después de cada entrevista y deben observarse estrictas medidas de higiene.
Tenga mucho cuidado al manipular bolsas de plástico, ya que son más rígidas que una malla o una espuma, por lo que existe el riesgo de que salgan gotas de la bolsa. Retire la bolsa con cuidado, sacándola de adentro hacia afuera (tal como se hace al retirarse un condón).
Mantenga sus cables y bases de micrófono limpios
Los cables y soportes de micrófono también deben desinfectarse antes de volver a usarse. Sin embargo, a diferencia de las superficies de metal y plástico, los cables no deben limpiarse con alcohol. Si necesita desinfectarlos, hágalo frotándolos con un paño húmedo o una esponja remojada en agua tibia y jabón.
Asegúrese de frotarlos bien, tal como lo haría con sus manos. Deje que se sequen durante un mínimo de 72 horas para asegurarse de que no haya agua ni humedad.
¿Cuáles micrófonos se pueden limpiar?
Antes de que usted se apresure a buscar un detergente, es importante comprender las diferencias entre los micrófonos.
- Los micrófonos dinámicos son mucho más robustos que los micrófonos de condensador, lo que los hace ideales para presentaciones en vivo y el estrés que eso conlleva.
- Los de condensador, por el contrario, son mucho más frágiles y requieren una atención especial a la hora de limpiarlos.
- Los micrófonos de cinta y de tubos o válvulas son aún más frágiles, y la recomendación para su limpieza es consultar con el fabricante antes de empezar a usar un viejo cepillo de dientes.
Para los micrófonos dinámicos, generalmente solo hay que quitar o desatornillar la rejilla. La rejilla es esa capa protectora que separa lo que sucede en el interior del mundo exterior lleno de suciedad, por lo que, si puede quitar la rejilla, podrá usar una solución básica de agua y detergente suave para limpiarla.
Un cepillo de dientes ayudará cuando se trata de limpiar entre los espacios.
Si no se puede quitar la rejilla frontal, o si está usando un micrófono de condensador, el mejor consejo es evitar el agua o cualquier forma de líquido. Los micrófonos son cosas delicadas y definitivamente no les gusta el agua.
Nuevamente, un cepillo de dientes lo ayudará a eliminar la escoria seca, pero asegúrese de sostener el micrófono boca abajo para que las partículas sueltas caigan al piso, en lugar de volver al interior.
Cómo limpiar un micrófono dinámico
Podría decirse que los micrófonos dinámicos son los más fáciles de limpiar. La mayoría vienen con una rejilla que se puede desatornillar o separar suavemente del cuerpo.
Paso 1. Desenrosque o retire la rejilla del micrófono, teniendo cuidado de no dañar el cartucho.
Paso 2. Con la rejilla quitada, coloque el cuerpo del micrófono a un lado. Usando una solución de agua tibia y detergente suave (el líquido para lavar platos está bien), limpie la rejilla para eliminar la capa superficial de suciedad.
Paso 3. Usando un cepillo de dientes, frote suavemente la rejilla, teniendo cuidado de entrar en todas las esquinas y cavidades. La combinación del detergente y el cepillo de dientes asegurará que se elimine cualquier residuo adherido. También puede usar un desinfectante suave para eliminar los insectos o microbios desagradables que todavía andan por ahí.
Paso 4. Permita que la rejilla ahora limpia se seque naturalmente. Sea paciente aquí; incluso una gota de agua podría matar su costoso micrófono si entra. Mientras se seca, use una toallita desinfectante para limpiar el cuerpo del micrófono, teniendo cuidado de no dañar los componentes electrónicos del interior.
Paso 5. Cuando la rejilla y el cuerpo estén completamente secos, vuelva a colocarlos juntos.
Cómo limpiar un micrófono de condensador
Limpiar un micrófono de condensador es una tarea mucho más complicada, porque pocos tienen rejillas desmontables y todos ellos son mucho más frágiles electrónicamente. Entonces, la clave para limpiar un micrófono de condensador es tener cuidado.
Frote suavemente la rejilla con un cepillo de dientes suave y seco. Mantenga el micrófono hacia abajo para asegurarse de que las partículas sueltas caigan de la rejilla. Tenga cuidado de no empujar la suciedad a través de la rejilla y hacia la cámara.
Al igual que con un micrófono dinámico, puede emplear una toallita desinfectante para limpiar el cuerpo.
Conclusión
Nuevamente advierto que no soy un virólogo ni un experto en sanidad. Los procedimientos que he mostrado son pautas, pero es posible que no erradiquen por completo el peligro de un contagio.
Como sea, preocúpese por mantener sus micrófonos limpios a toda hora, no solo por su salud sino por su desempeño técnico. La suciedad acumulada corroe las partes más delicadas y bloquea la entrada del sonido.
