La música es un elemento clave y el arte que probablemente menos desaprobación tiene por sí mismo entre las personas. Se puede considerar música desde el sonido de la lluvia, hasta el cantar de los pájaros, que en conjunto con otros sonidos logran hacer armonías perfectas de naturaleza que resultan relajantes para quienes tienen el tiempo de detenerse a escuchar.
Actualmente existen 40 géneros musicales primarios y 300 subgéneros; los hay para todos los gustos y momentos. ¿Acaso no has visualizado una canción que logra ponerte feliz con un día soleado o esa producción que te lleva a recorrer los lugares más sombríos y tristes de tus sentimientos? Sin duda nuestra biblioteca personal es variada y muy bien clasificada para cada situación.
Ahora, sabemos que hay música para ir al súper, para esperar en un elevador, para una fiesta, para una noche romántica, pero, ¿hay música adecuada para trabajar?, ¿realmente escuchar algo no te llevará a desconcentrarte de tus actividades? Informes recientes de escritores británicos de Dissertation Today han concluido que escuchar este arte mientras se trabaja es positivo para aumentar la productividad, resolución de problemas y la creatividad, lo importante es saber elegir qué temas te llevan a ese estado mental.
Un estudio comparó a dos grupos de ingenieros que trabajaban; el primer grupo lo hacía con música y el segundo sin música. Se llegó al hallazgo que los que estaban escuchando melodías tenían un mejor desempeño debido a las endorfinas que les generaba escuchar canciones, además que el ambiente de trabajo se tornaba más tranquilo al tener a personas felices.
También se descubrió que para las personas que realizan tareas repetitivas que no requieren concentración, se recomienda usar música compleja, con letra y los ritmos pueden ser variados. Sin embargo, si la tarea requiere completa concentración se recomienda que se utilice música clásica, pop balada, o sonidos ambientales, los cuales darán calma a quien esté realizando la tarea.
Se debe ser flexible, probablemente estés realizando trabajos que requieren concentración total, por lo que no siempre se podría utilizar música relajante. Si algo te hace sentir feliz, date tiempo de escuchar algo que te mejore el ánimo. También se puede jugar con el volumen de la reproducción; puedes tener canciones con letra pero a un volumen bajo y realmente el resultado será favorable.
Esta nota fue realizada con base en una publicación hecha por musicthinktank.com
