Luego de la cacería que ha habido a las radiodifusoras piratas, se ha encontrado una nueva estación ilegal transmitiendo en el 95.5 FM de Colorado. La emisora está a cargo de Alexander Brittin y Philip Brittin, quienes desde su casa están colgándose de una frecuencia en la cual no tienen una licitación para operar.
Luego de que las autoridades de Estados Unidos encontraran en operación esta emisora, la Comisión Federal de Comunicaciones ha puesto en aviso a los propietarios de esta radiodifusora ilegal, los cuales tendrán 10 días naturales para dejar de operar, de lo contrario, la autoridad se verá en la necesidad de decomisar los aparatos tecnológicos con los cuales se están logrando estas transmisiones.