La compañía Tecnoradio solicitó un amparo que a su vez habría generado que al menos otras 4 compañías también pidieran amparos, todo esto luego de que incumpliera con sus pagos por las frecuencias en las que se interesó durante la última licitación de radio.
Para otros concursantes, este amparo y otros solicitados por más participantes que incumplieron sólo empantanan la licitación, además de que solicitan que se reponga el proceso o se indemnice por daños y prejuicios.
La mayoría de los amparos presentados se establecieron en el Juzgado Primero de Distrito Especializado en Telecomunicaciones y Radiodifusión, y fueron los dueños de la empresa Activación Radiofónica y Medios quienes promovieron el amparo 1003 2017 para impugnar una resolución mediante la cual no se le otorgó constancia de participación dentro de la licitación, es decir no fue admitida por el IFT para contender en la subasta.
Otros tres litigios fueron promovidos por empresas cuyos nombres no fueron revelados en las listas del Consejo de la Judicatura, y son los amparos con número 1239 2017 1240 2017 y 1241 2017, en donde las empresas están impugnando nada menos que las bases de la licitación pública para concesionar el uso, aprovechamiento y explotación comercial de una banda de frecuencia para la prestación del servicio público de radiodifusión sonora.
Analistas consideran que estos amparos –que se promovieron antes de que saliera a la luz el polémico caso de la empresa Tecnoradio– son apenas el inicio de una batalla legal que pondrá a prueba la validez del proceso y la credibilidad del IFT.
Con información de Adrián Arias, La Crónica.
