Divine Songs es mi empresa pero todos me conocen como Claudia Pieragostino – Pulido me comenta de inicio.
¿Cómo fueron tus inicios en el medio?
Conocí a Máximo Aguirre y comencé a trabajar con él, esos fueron mis inicios en las editoras. Eso fue hace años cuando me vine a vivir a Los Ángeles. Después de estar en esa empresa por diez años, me independicé y comencé a trabajar con Latin Power Music y algunas editoras de regional mexicano.
¿Cuál es el estado actual de la música latina en cuanto a negocio?
Creo que hay dos géneros que están en boga ahora mismo, el regional mexicano y el urbano, pero no compiten entre sí, sino que conviven en el gusto de la gente.
¿Cuáles son los retos a los que se enfrenta la industria?
La venta de discos tiene tiempo que no funciona, y hubo un tiempo en que se pensaba que la música en streaming no iba a ser negocio, pero ahora todo se está estabilizando, la industria musical pasó de estar en una crisis a una estabilidad en general.
¿Y cómo editora, cuál es la problemática a la que te enfrentas?
Que los autores reciban las regalías que les corresponden. En Estados Unidos hay muchas entidades que luchan por los derechos del autor, ya que para muchos el que interpreta es quien debe recibir las regalías. El reto, el desafí, es ayudar a los autores.
En esto de las ganancias del streaming, quienes más ganan son los artistas consagrados, pero los nuevos, ¿pueden vivir de esto?
Sí, para mi punto de vista todo depende de las canciones, una buena canción va a generar regalías aunque el artista sea nuevo, tener una buena composición es el primer paso.
Y ya de las editoras depende colocar y monetizar las canción,pero ¿en México se dará la misma situación con los autores?
En Estados Unidos se está apelando en el Congreso por una buena resolución. En México existe Emmac, creada por SACM y varias editoras que se han unido para defender esos derechos.