La clave para responder esta pregunta sin caer en facilismos, es pensar en uno de las características fundamentales de la industria radiofónica: la creación de imágenes visuales. Es decir, a través del sonido se construye una imagen mental en el auditorio y es ahí en donde tenemos que apuntar los contenidos virales.
Un meme, por ejemplo, es un dispositivo sumamente concreto, que obedece a la coyuntura, lo que está de moda o el tema del que todos hablan. Si la radio se inserta en la discusión a través de contenidos virales, puede demostrar el dinamismo de la plataforma y acercar a las nuevas generaciones.
Pero… ¿cómo haríamos para hacer un meme en las emisiones radiofónicas?, pues, justamente, haciendo uso de las imágenes radiofónicas.
Mediante efectos de sonidos o inflexiones cómicas en la locución, podemos tomar alguna broma, resbalón de algún famoso o cualquier situación de la vida cotidiana y convertir la cápsula sonora en una suerte de radio-meme.
Eso sí, lo ideal es que encontremos la manera de vincularlo con nuestra marca radial, y que, además, el meme sea lo suficiente ligero como para ser transmitido por las redes sociales o los servicios de mensajería. Lo vital para un meme es su gran capacidad de distribución y, por lo tanto, de viralización.
Yeni Rueda