Hay que adaptarse al conductor: Teresa López de MVS

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¿Cómo es tu jornada diaria?

Estoy adelantada con 15 días de anticipación en cuanto a invitados, pero depende mucho de la nota del día, la coyuntura, todo ese día. Esto lo platico más con José Luis Guzmán, principalmente si necesitamos agregar algo más. Tratamos de escoger los temas cuidadosamente, ya que los de la mañana ya se vieron en todos los programas. Tratamos de que sea algo que haya salido de preferencia después las 3 de la tarde. Buscamos darle la vuelta con algún politólogo o analista diferente como el abogado Alonso Beceiro, que no sean los que salen en todos lados.

¿Cómo es tu dinámica de trabajo?

charros-gangsters-vYo llego a la oficina alrededor de las 4 o 5 de la tarde. Hay que estar checando que los invitados vengan, si hay cancelaciones, presentaciones de libros. Como José Luis y Jairo saben mucho, dominan muchos temas. Aunque no esté físicamente en la estación se está trabajando todo el día; se piden audios o la música. Yo no me meto en problemas con eso porque ellos hacen su propia selección y son muy específicos. Mucha gente también nos hace sugerencias por redes sociales, como el caso de la sección: “Viernes de Música Horrible” y de ahí jalamos audios.

¿Cómo es la producción en otros programas de los que te encargas?

Trabajo más aquí, pero también con el Doctor Héctor Zagal y con Jenny Nacif “En Confianza”. El doctor viene en vivo, es académico y tiene un equipo que trabaja los guiones y luego los mandan. La persona que se encarga en la música graba un teaser y se sube a la carpeta. Con Jenny Nacif todo es grabado, es en frío. Con ella grabo de tres a cuatro programas cada tres semanas y con ella todo es muy sencillo, es más de revista de salud humana, le gustan temas de pareja, de infidelidad, etcétera.

¿Todo resulta más complicado con los “Charros”?

Sí, porque son dos horas, siempre es en vivo, es muy diverso y hay que estar metiéndole cosas. Además hay invitados, a veces hay que improvisar.

¿Qué otra experiencia tienes?

Yo empecé hace 19 años en XEW, estaba estudiando en la Universidad del Valle de México, campus Tlalpan; empecé a mitad de la carrera. Por azares del destino llegué con Ricardo Rocha, llegó a la coordinación de XEW Claudia García Conde. Había tres producciones importantes en ese entonces: Janett Arceo, Cristina Pacheco y Martha Susana. Trabajé con Martha Susana y con Cristina; empecé de asistente, apoyaba al coordinador de invitados. Teníamos un programa de noticias, el otro era de una personalidad. Luego estuve en Radio Fórmula, en Radio Capital. En MVS llevo apenas tres años.

¿Cómo es discernir y desechar información?

Para “Charros” puedo meter política, escritores, ciertas películas. No puedo integrar tanto teatro, temas de salud o desarrollo humano porque sé que no les gustan. Con salud depende; por ejemplo, a José Luis sí le agradan y a Jairo le deprimen. Luego hay temas muy importantes como enfermedades raras que sí aceptan.

¿Algunos tips que puedas sugerir para la producción?

Varía mucho, hay conductores muy accesibles y otros muy especiales. Hay que adaptarte al conductor. A veces no necesariamente la relación se lleva fuera de la estación. Hay que saber qué les gusta y qué no. También hay que experimentar, a veces se debe improvisar mucho.

¿Cómo es cautivar a nuevas audiencias?

Adaptarse a la tecnología. Hacemos radio, pero hay que estar muy metidos en redes sociales, eso sí es muy importante.

¿Cómo es el manejo de temas atrevidos, albures, controversia, integrar otro tipo de lenguaje?

el-banquete-del-dr-zagalEs por la personalidad de los conductores, entre ellos surge el albur y luego luego lo sueltan; sé que les gustan los temas de sexualidad y saben manejarlos bien. Antes no era común, digamos con Cristina Pacheco, ella era muy correcta. Pero acá los invitados se ríen y les siguen la corriente, todo es más picarón, también los temas de las chicas sexys del calendario. Ellos son pícaros y cotorros. Con los otros todo es más serio. Jenny es muy hiperactiva y hace que el programa sea ameno, el doctor Zagal también es más serio, pero sí se ríe.

Miriam Canales

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