La labor de estos profesionales es fundamental para darle identidad a una estación, sobre todo si su mercado o catálogo es sumamente amplio. Y “curar”, seleccionar el material, es una tarea mucho más compleja de lo que lo parece.
El programador debe trabajar con varios niveles de material: el catálogo histórico, lo que es tendencia en el presente y mantenerse al tanto de los nuevos talentos para construir un flujo musical dinámico para todos los posibles radioescuchas.
Mantenerse informado, no tener miedo al riesgo, y un alto sentido de la creatividad son los mejores elementos que puede tener un programador exitoso.
Yeni Rueda