Van dos amigos por la calle:
– ¡Mira, un reloj!
– Sí, es mío, es que a veces se me adelanta.
– Yo no sé qué me pasa, que me gustan todas las mujeres menos la mía.
– ¡Bah! No te preocupes que a mí me pasa lo mismo, me gustan todas las mujeres menos la tuya.
– ¿Ha aprendido tu hijo a caminar ya?
– Sí. Lleva tres meses caminando.
– Pues sí que está lejos.
¿Qué le dijo una nalga a otra nalga?… Entre nosotros hay un soplón.
Una mujer le dice a su esposo, que lo ve tomando:
– Pero, ¿No te ha dicho el médico que nada de copas?
– Sí, por esto estoy bebiendo de la botella.