Si tienes menos de 10 años trabajando en radio, tal vez no conozcas las historias de terror de lo que era estar en cabina años atrás.
Tomar lectura del transmisor, llevar el log de música y comerciales, además de atender el teléfono (antes se contestaba), eran algunas de las actividades de rutina para un locutor.
La transmisión sistematizada y de network no solo está mermando la fuente de trabajo del locutor, sino también le permite tener excesivo tiempo de ocio que a la larga es contraproducente para su agilidad mental y creatividad.
Estudios científicos revelaron que los locutores y/o radio operadores actuales, tienden a ver su trabajo con tedio y desgano.
¿Qué hacer con tu tiempo libre en cabina?
La tecnología actual nos permite conectarnos a un vasto universo de información, utilízala para beneficio de tu programa. Busca notas frescas y de buena fuente y aprende sobre la geografía donde tienes radioescuchas, a todos les gusta que se mencione algo sobre su ciudad. Atiende tus redes sociales, cuidando su contenido, recuerda que son un reflejo (no siempre fiel) de tu persona y para el público, un locutor, es casi un amigo. Busca, lee y prepara contenido para programas subsecuentes.
Que el tiempo libre que te da la modernidad sirva para que tengas el mejor show, el que todos quieren escuchar!
