6 razones por las que su Morning Show es ignorado

Un Morning Show tiene una razón de ser. No se debe hacer simplemente porque otras emisoras lo hagan. Debe hacerse para llenar las necesidades de información, entretenimiento y diversión que la gente necesita en las mañanas.

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Su programa de la mañana podría ser, simplemente, aburrido y falto de interés... (Imagen creada con Copilot)

Cuando lanzamos “Despiértese con Veracruz”, el primer Morning Show en Colombia, hubo muchas personas que llamaron a la emisora a criticar lo que hacíamos. Nunca habían escuchado algo parecido y sentían que iba contra todas las reglas de la radio tradicional.

Por esa época, 1986, en Colombia se tenía la creencia de que las emisoras musicales en FM no deberían tener mucha locución, y si la tenían, debería ser tranquila, con voces pausadas y gruesas y engoladas, sinónimo de elegancia.

Pero el éxito de Veracruz, desde sus inicios en 1984, fue precisamente ir en contra de lo que hacía la radio en esa época, cuando también se creía que en las mañanas había que poner música suave y tranquila para no “molestar” a los oyentes.

De repente, en esta emisora comenzamos a hacer juegos y concursos a esa hora. Éramos un equipo que se divertía al aire con buen humor, personajes caricaturescos, interacción con los oyentes y todo tipo de información de entretenimiento, deportes y actualidad.

Quienes nos criticaban sentían que estábamos haciendo “radio de AM en FM”, que estábamos profanando el templo del buen gusto… ¡y tenían razón!

Unos años más tarde, cuando llevé esa idea a Radioactiva de Caracol, la empresa de radio más importante del país, muchos creían que este formato solo funcionaría en emisoras orientadas al público juvenil, y estaban muy equivocados.

De hecho, mi jefe no me creyó, hace 35 años, cuando le dije que algún día no muy lejano todas las emisoras musicales tendrían su programa de la mañana.

Probablemente esa forma de pensar radicaba en que, al igual que mi jefe, muchos pensaban que un Morning Show tenía que se una especie de ‘zoológico’, con humoristas, concursos, bromas telefónicas y todo tipo de locuras.

Por qué una emisora musical debe tener un Morning Show:

Existe un mito muy extendido que dice que los seres humanos debemos dormir, en promedio, 8 horas diarias. Algunos dicen que realmente debería ser entre 7 y 9 horas, aunque es claro que hay gente que necesita más o menos horas de sueño.

Pero suponiendo que lo de las 8 horas es cierto, ese sería el tiempo durante el cual una persona promedio estaría desconectada del mundo y, en esta era de la información, eso es demasiado tiempo sin saber lo que está pasando a nuestro alrededor.

Además de la desconexión, todos sabemos lo duro que es levantarse a estudiar, trabajar o simplemente a enfrentar nuestras rutinas diarias. Ese despertar en la mañana es para muchos como un choque, un duro ‘aterrizaje’ en el mundo real.

Por eso se crearon los ‘Morning Shows’. La idea es alegrarles la mañana a los oyentes para que su despertar sea más amable y entregarles la información que necesitan para saber contra qué se van a enfrentar en su día, qué es lo que les espera y estar así preparados para afrontarlo.

Es decir, un Morning Show tiene una razón de ser. No se debe hacer simplemente porque otras emisoras lo hagan. Debe hacerse para llenar las necesidades de información, entretenimiento y diversión que la gente necesita en las mañanas.

Por qué la gente ignora su Morning Show

Muchas veces a las directivas de la emisora se les ocurre que deberían tener su programa de la mañana por las 2 razones anteriores o simplemente porque no se quieren quedar atrás de sus competidores o de la moda.

Entonces la emisora lanza su nuevo Morning Show y se sientan a esperar si se produce el milagro. Y esperan… Y esperan. Pero resulta que la audiencia no lo conoce todavía, o lo conoce, pero no le importa. ¿Qué ocurre? Hay 6 razones:

  1. Porque los integrantes del programa no saben lo que hacen

Lo primero es definir qué espera de su programa, cómo satisfacer las necesidades de su audiencia. ¿Va a ser un programa chistoso, informativo, más musical? ¿Quiere un combo de locos o prefiere una pareja tranquila y amable?

Luego tiene que definir los roles: qué tareas le corresponden a cada uno de los participantes, qué personalidad van a asumir y qué porcentaje del tiempo van a ocupar dentro del programa.

Pero, ante todo, hay que entrenarlos. Aunque suene duro, muchas veces las directivas de las emisoras no se distinguen precisamente por desarrollar a sus talentos, tal como lo mencioné en un artículo anterior llamado “Señor director: ¿está entrenando a su reemplazo?”, que puede leer dando clic aquí.

Hay personajes que saben entrenar y crecer al lado de su gente, les permiten equivocarse, corregir, aprender y brillar por cuenta propia. Realizan ‘Airchecks’ de manera regular, resaltando lo bueno y sugiriendo cómo mejorar su desempeño.

Defina los roles, asegúrese de que cumplan con ellos y reúnase con los integrantes regularmente para corregir lo que haga falta.

  1. Porque el programa no es tan diferente de los demás

El problema de muchos programas es que tratan de copiar lo que han hecho otros. A mí me pasó. Escuché el “Morning Zoo” de Z-100 de Nueva York y quise copiarlo, sin saber por qué lo hacían y sin entender que estaba diseñado para los neoyorquinos y no para el público de Medellín.

Solo hasta que supimos acomodarnos a lo que el público esperaba de nosotros logramos tener un verdadero éxito.

Cuando una emisora copia el programa exitoso de un competidor, con los mismos temas, bromas, imitadores, concursos y secciones, la audiencia que escucha ambas emisoras prefiere quedarse con la original, aunque no sea la mejor.

Por algo hay un dicho que reza: “Mejor malo conocido que bueno por conocer”.

¿Por qué alguien debería cambiar su programa de siempre, que le ha satisfecho durante años, por uno nuevo que es simplemente una copia del otro?

Si usted quiere que su programa despegue, deje de copiar a su competidor. Más bien piense en qué puede hacer diferente para llenar las necesidades de los oyentes de su emisora.

Trate de entender qué les hace falta en cuanto a información, humor y entretenimiento y de qué forma y en qué tono quiere que se lo digan, y construya el programa alrededor de esos conceptos.

  1. Porque los oyentes aún no han logrado conectarse con sus talentos

A no ser que en su ciudad nunca hayan escuchado un Morning Show, que usted traiga una idea revolucionaria o que dispone de un presupuesto promocional y de lanzamiento realmente importante, tenga presente que un programa no despega de la noche a la mañana.

Al igual que una emisora nueva, un programa nuevo también necesita que pasen meses antes de que el público empiece a habituarse a él, a escucharlo de manera regular y de convertirlo en su espacio favorito.

Es posible que usted se pregunte por qué la gente sigue escuchando a su competidor si usted está haciendo un mejor programa. Y puede que sea verdad.

Lo que pasa es que, probablemente, el otro programa lleva ya un buen tiempo construyendo un lazo de amistad con sus oyentes. Un consultor estadounidense decía: “Los oyentes no escuchan tu programa de hoy. Lo que escuchan hoy es un acumulado de escuchas desde que empezaron a oírlo”.

Es decir, ya tienen el hábito. Y romperlo es muy difícil. La relación del público con los talentos del programa es de largo plazo y ese lazo se construye día a día con el correr del tiempo.

  1. Porque los talentos al aire son DJ’s y no seres humanos

Una cosa es hacer un turno y presentar canciones, pero otra cosa es enganchar a la audiencia con los contenidos que se transmiten.

Esa es, precisamente, una de las grandes dificultades que enfrentan los “locutores” creados con IA. No tienen la calidez ni la empatía con los oyentes. No entienden lo que quieren, no saben cómo conquistarlos.

Los humanos tenemos fortalezas y debilidades, defectos y bondades. Todos distinguimos una puesta al aire superficial o ficticia como la de un robot… o la de un simple disc-jockey que solo sabe presentar canciones y pedir que manden ‘saluditos’.

Los integrantes de un Morning Show deben dejar de lado sus temores y mostrarse como son, con sus particularidades, con sus puntos de vista, hablando de lo que les gusta y de lo que no, mostrando que son humanos y que tienen sentimientos, y que saben entender lo que sienten sus oyentes.

  1. Porque la gerencia no quiere un Morning Show grande, sino uno barato que sea grande

La mayoría de las veces hay una proporción entre lo que se invierte y los resultados obtenidos. Y esto aplica también para los programas de la mañana.

En un mundo tan competitivo, cuando ya no solo hay que enfrentarse a otras emisoras sino contra las redes sociales y las plataformas de música y videos en streaming, cada vez es más importante invertir en talentos que puedan atraer y retener a la audiencia.

Claro, si usted simplemente quiere que su emisora tenga un programa que acompañe a la audiencia sin mayores pretensiones, está bien que lo haga con pocos recursos, pero si lo que quiere es llegar al primer lugar, superar a sus competidores y conseguir una buena facturación, tendrá que empezar a pensar en grande.

  1. Porque “me gusta” y “lo escucho” son cosas diferentes

Existen presentadores de programas, presentadores buenos de programas y presentadores grandiosos de programas.

El problema es que hay demasiados de los primeros, un poco menos de los segundos y muy pocos de los terceros.

Una cosa es cuando un oyente dice que le gusta el Morning Show de su emisora, pero otra cosa es cuando alguien dice que es su preferido, que es el que escucha todos los días.

Y la diferencia se logra solo con esos grandes talentos, con esos personajes que saben enganchar a la audiencia.

Puede que su presentador del Morning Show sea una gran persona, un modelo de ciudadano, pero si un oyente solo dispone de 20 minutos para escuchar radio en la mañana, los quiere pasar con el personaje más entretenido, cautivador y seductor del dial, no con una hermanita de la caridad.

Lleve su programa al próximo nivel. Seguramente será más costoso invertir en un gran talento, pero el retorno, indudablemente, será mayor.

Conclusión

Antes de crear un nuevo Morning Show o de tratar de levantar el que tiene actualmente, piense primero en lo que espera de ese programa, en qué necesidades del público quiere llenar.

Cuando lo tenga claro, defina cómo lo va a lograr, qué contenidos quiere entregar y qué tipo de personajes serían los ideales para cumplir con su cometido.

Luego, procure contratar los mejores talentos que su presupuesto permita, asigne claramente los roles y haga seguimiento de su desempeño.

Y, finalmente, no olvide promocionarlo con fuerza. Hoy en día hay muchas herramientas para lograrlo, incluso sin una gran inversión, pero sí con mucha creatividad. En este caso, las redes sociales y las plataformas de video serán sus grandes aliadas.

ACERCA DEL AUTOR
Tito López hace radio desde 1975 y ha creado formatos radiofónicos exitosos en Colombia, Portugal, España, Estados Unidos, Chile, Panamá y Costa Rica.
Es coach de talentos, intérprete de investigaciones de audiencia, productor, blogger, libretista y conductor de programas de radio.
Lo puede seguir en Facebook como Oscar.Tito.Lopez y en Twitter como oscartitolopez.
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