El Storytelling o el arte de contar historias está compuesto por cuatro elementos: el mensaje, el conflicto, los personajes y la trama; sin embargo, creemos que hay otros componentes externos que apoyan que un mensaje pueda conectar con las audiencias, y a la vez siendo bien entendido.
- Ritmo y tiempo
No tienes idea de lo poderosos que son los silencios y el ritmo que le imprimes a una narración, ya que con base en ello sembrarás en tu audiencia suspenso, ansiedad, nerviosismo, etc.
- Calidad técnica
Aunque no lo creas, la baja calidad en las transmisiones, en las historias o en la narración son distractores que pueden afectarte.
- Interactividad
Haz pausas en la narración para incluir a tu oyente. Pregunta: “¿Tú qué hubieras hecho?”, “¿Consideras que el personaje actuó de la forma correcta?”, etc. Estos pequeños ganchos hacen que la gente vuelva a prestar atención.
- Entonación de la narración
No queremos obviar uno de los elementos principales, la entonación. Acuérdate que las variaciones vocales también están emitiendo mensajes implícitamente.
- Efectos de sonido
Estos pueden ayudar a crear la atmósfera adecuada para cuando quieras transmitir un mensaje. Los efectos deben complementar, no sobrecargar la narración.
- Migajas de pan
Aprende a dejar pequeños avances de lo que va a suceder para que la gente se mantenga enganchada.
- Descripción visual
Dibuja un escenario en tu mente y da detalles de él. Harás que la gente se transporte a diferentes lugares.
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