A través de distintos medios de comunicación se especuló acerca de cómo será la nueva normalidad en los eventos masivos una vez que estos comiencen a operar con mayor frecuencia en Estados Unidos. Algunas fuentes aseguraron que Ticketmaster, subsidiaria de Live Nation, pediría pruebas negativas de COVID-19 a cada uno de los asistentes, teniendo que ser estos tests de los días recientes, para que la posibilidad de contagio fuera menor.
Mark Yovich, presidente de Ticketmaster emitió un comunicado en donde dijo que no será la propia compañía la encargada de verificar el estado de vacunación de la gente. Por otra parte manifestó que puede ser que los organizadores de algunos eventos sí pidan estas pruebas negativas de COVID-19; todo dependerá de cada evento, por lo que siempre los propietarios de boletos deberán estar al pendiente sobre las medidas que se anuncien para cada show en específico.
“Imaginamos que habrá muchos proveedores externos de atención médica que se encarguen de la investigación, ya sea para obtener una vacuna, realizar una prueba u otros métodos de revisión y aprobación, que luego podrían vincular sus resultados a través de un boleto digital para que todos los que ingresen al evento.
El objetivo de Ticketmaster es brindar suficiente flexibilidad y opciones para que los lugares y los fanáticos tengan múltiples caminos para regresar a los eventos. Estamos trabajando para crear integraciones a nuestra API y tecnología líder de emisión de boletos digitales, ya que buscaremos aprovechar las mejores soluciones basadas en lo ecológico”, mencionó Mark.
Como un dato extra, al inicio de semana que se anunciaron esfuerzos positivos en la vacuna de Pfizer, las acciones de Live Nation crecieron en un 29%, con lo cual cerraron en 64.36 dólares cada una. Esta cifra significó el precio más alto obtenido desde antes de iniciada la pandemia.
Esta nota fue realizada con base en un artículo publicado por Digital Music News.