Para incursionar en el mundo de la locución, muchas personas estudian la carrera de Ciencias de la Comunicación en diversas universidades; además toman cursos en donde aprenden a modular la voz, a usar correctamente el apoyo diafragmático, a respirar correctamente para que el hilo de sonido suene firme; asimismo también se les enseña a encontrar sus diferentes matices vocales y se les ayuda a descubrir una gama de posibilidades que pueden obtener al dominar su aparato fonador.
Sin embargo, hay algo esencial en esta carrera, lo cual sólo se aprende con el tiempo detrás de un micrófono; el saber escuchar. La mayoría de los grandes locutores han forjado grandes carreras en este medio debido a que han aprendido a estar alerta sobre lo que los radioescuchas quieren decir al momento de comunicarse a cabina.
El escuchar no sólo se trata de parar la oreja, sino también de que al momento que realizas esta acción, tu mente esté comprendiendo un mensaje y a su vez esté formulando una respuesta que haga sentir bien a la persona que se está comunicando a la emisora.
Recuerda algo muy importante, la gente establece verdaderos vínculos emocionales con aquellas personas/emisoras/locutores que realmente brindan atención. En radioNOTAS hemos preparado algunos sencillos puntos sobre este tema que a muchos nos cuesta trabajo, tómalos en cuenta para mejorar tu capacidad de escucha.
- Entender las necesidades de tu radioescucha
El transmitir una llamada al aire, no sólo significa atender una petición de canción o de regalos, sino deberás tener en cuenta a tu radioescucha, el cual tiene la necesidad de ser escuchado. Sé empático y siempre sé cortés.
- Saber leer entrelíneas
Es importante saber leer entrelíneas para detectar con qué emoción se está comunicando una persona a cabina; escúchala y bríndale alguna palabra amable. A veces como locutores no imaginamos que una frase positiva, pueda impactar la vida de nuestros radioescuchas.
- Que tus radioescuchas no sean clientes, hazlos tus amigos
Permite que tu capacidad de comunicación haga que los radioescuchas se sientan tan cómodos como si estuvieran teniendo una charla con un amigo. Sabemos que en ocasiones la carga del trabajo es fuerte, o que las presiones podrían ponerte de mal humor, sin embargo, te recomendamos aprender a separar los asuntos internos de la radio, con la interacción con la audiencia.
Ten en mente que los públicos actuales exigen medios y anfitriones interactivos y cálidos, por lo que te sugerimos desarrolles esas habilidades humanas tan sencillas como el saber escuchar.
