Esta nota fue realizada con base en una publicación hecha por radialistas.net
Para los locutores la cabina es un lugar muy importante, puesto que no solo es el espacio donde trabajan, sino un lugar donde comparten muchas experiencias y donde generan un ambiente laboral positivo, donde todos los días, entran a dar lo mejor de sí, para sus radioescuchas.
Pero la pregunta es, ¿cómo es esa cabina? Y no queremos hacer referencia a si tienen aire acondicionado o cuáles son sus proporciones, sino el tipo de cabina que tienen.
Es por ello que les mencionaremos algunos tipos de cabina
- LA CABINA QUIRÓFANO
Es en la cual debes entrar en puntillas, donde incluso los operadores y locutores te dicen ¡Silencio! En la siguiente cabina no se habla, ni siquiera se susurra.
Por esto el nombre de quirófano, ya que parece que hay un enfermo, agonizante, sobre el estudio.
- LA CABINA CAFETERÍA
Por el otro extremo existen cabinas que parecen cafeterías. El locutor hace lo que quiere, entra con su agua o café. De hecho antes incluso el técnico sacaba su cajetilla de cigarros y encendía uno, ahora ya no es posible esto.
Esto es terrible para la salud de los locutores que lo hacen y para el mantenimiento del equipo donde se encuentra pedazos de alimentos. En un estudio lo ideal es entrar con agua para la voz solamente.
- LA CABINA CAMAROTE
En está los locutores utilizan la voz como seducción, por lo general se dedican a contestar llamadas. Por supuesto con la finalidad de que los oyentes sintonicen dicho programa.
Su objetivo es que existía una participación activa; ya que muchas veces resulta más dinámico hacer este tipo de actividades, sólo sin confundir que es una cabina no un camarote.
- LA CABINA FRÍA
¿Sabías que el cristal que separa el espacio de los controles y el de la locución es el mayor enfriador? Es por esto, que este último se conoce como la pecera. Aunque este separador en algunas ocasiones resulta innecesario, ya que con los equipos miniaturizados e insonoros con los que se cuenta hoy en día.
¿Es una ventaja quitar el cristal? La respuesta es un si, puesto que la cabina gana amplitud y se logra una mayor y más cómoda interacción entre quienes hacen la operación técnica y los que ejecutan el programa, o sea, los locutores.
