– ¿De qué se le acusa?
– De haber hecho mis compras navideñas con anticipación, Señor Juez.
– Pero eso no es un delito, ¿con cuánta anticipación las compró usted?
– Antes que abrieran la tienda.
– Papá, me quiero casar con mi abuela.
– ¿Cómo te vas a casar con mi madre?
– ¿Y como tú te casaste con la mía y yo no dije nada?
– ¿Tiene tarjetas que digan para mi único y verdadero amor?
– Sí tenemos.
– Deme ocho, por favor.
– Yo no sé qué me pasa, que me gustan todas las mujeres menos la mía.
– ¡Bah! No te preocupes que a mí me pasa lo mismo, me gustan todas las mujeres menos la tuya.
Dos amigos van por la calle:
– ¡Cielos! ¡Mi mujer y mi amante vienen charlando juntas hacia aquí!
– ¡Caramba! ¡Yo iba a decir lo mismo!