Por más de una razón la posición más complicada dentro de una estación de radio es la del director de programación. Esos seres superiores no solo tienen que conocer sobre música, también deben dominar relaciones públicas, marketing, medición y ventas. En otras palabras, es un todólogo que soporta los embates más duros al tener que lidiar con sistemas y personas que no saben realmente cómo funciona su puesto.
El escucha es el primer ser del que el programador depende; están los que son activos y escuchan la radio todo el día, los inactivos que suelen escuchar desde el trabajo y los que cumplen con los dos perfiles antes mencionados. Éstos son los peores porque dependes de sus mediciones y su obvia irresponsabilidad.
La programación de radio es divertida; sin embargo, también es competitiva y saca el peor lado de los individuos que la ejercen, ya que están en constante presión para realizar las cosas. Las personas que aspiran a este puesto deben conocer muy bien la cultura del país, sociedad, consumo, deportes y hasta religión.
¿Qué se necesita para ser un buen director de programación? Aquí unos tips de Sam Weaver, editor de RadioCoach.biz.
Primero, debe ser un motivador con un plan. Tiene que conocer la química y fluidez de la estación, además de tener un nivel alto de conocimiento de la radiodifusión.
Segundo, debe investigar, cual detective, el estilo de vida de la audiencia, además de tener buenos gustos musicales. La búsqueda constante de tendencias es demasiado importante como para depender de una sola persona para realizar la tarea. Nunca hay información suficiente.
Tercero, conocimiento del producto. Todo depende del formato, si es para adulto contemporáneo, la música es el objeto a promover, si son noticias, entonces es la información. Es una línea de pensamiento muy lógica de seguir. Ser una persona de mente abierta ayuda a comprender este aspecto a la perfección. Recuerda que el mejor negocio se da cuando conoces a la perfección lo que vendes.
Cuarto, control del equipo de trabajo. El programador debe conocer bien a todo el equipo que lo rodea para sacar los proyectos adelante.
Quinto, promoción constante. En el papel a la audiencia no le importan los regalos, en la realidad sí. Realizar una buena promo es trascendental para que una estación se mantenga a flote y mueva a sus escuchas para accionar.
Sexto, las ventas y la programación son uno. Hay una idea de que lo editorial no debe mezclarse con el dinero, sin embargo son dos ramas que deben ir de la mano por una sencilla razón: así llega la mayor parte del dinero. El director de programación debe ser bueno para mezclar ventas y radio.
Séptimo, preparación constante. El director de programación a estas alturas ya está saturado de acciones, es más, parece que trabaja más que un pobre becario al que no le pagan. El individuo a cargo del puesto tendrá que escribir, leer, preparar los programas, llevar direcciones y al final ser positivo.
Cuando una estación encuentra el éxito en ventas, ratings y amor de todos lados, es porque su director de programación hizo su trabajo al pie de la letra y logró los resultados que buscaba.
Con información de Radio Coach.
