Hoy por hoy, esta agencia de talentos y disquera –una de las primeras en entender que la conversión a servicios en 360 grados era la clave– continúa cosechando éxitos como OCESA-SeiTrack, y expandiendo sus horizontes.
Alex, ¿cuál es el antecedente SeiTrack?
Antes la industria musical estaba basada en dos grandes bastiones. Uno, la casa discográfica, en la que el artista llegaba y grababa un disco. Se le daba un gran adelanto de regalías, porque los artistas vendían millones. Además, las disqueras tenían muchos recursos para promover esos álbumes. SeiTrack entró en ese contexto a la industria.
Cuando la caída del CD fue estrepitosa primero por la piratería física y luego por los medios digitales, eso generó que los artistas y los managers como nosotros enfrentáramos el reto de asumir ciertas funciones que antes hacía la discográfica.
SeiTrack fue de las pocas empresas que aprovecharon esa coyuntura para despegar, ¿cierto?
La verdad es que a nosotros la tecnología nos ayudó a grabar discos sin tanto presupuesto, ya no necesitábamos de esos grandes estudios costosísimos que tenían las compañías disqueras y comenzamos a grabar discos de forma más accesible. Nosotros le ofrecimos a los artistas eso que ya no tenían: ser su manager, su sello disquero. Contratábamos gente que las disqueras estaban dejando ir, para promoción en radio y TV, y le sumamos las capacidades de nosotros para “bookear”, planificar las giras y hacer el marketing.
Le ofrecimos a los artistas un esquema 360 donde le dábamos todos los servicios y no necesitábamos de nadie más. Quizás el reto fue la distribución física, pero hicimos alianzas y comenzamos vender toneladas de shows y de discos y en ese año, que era 2000, nos dimos cuenta que éramos capaces de no depender de una compañía transnacional.
¿Siguen recurriendo a los medios tradicionales?
Ha cambiado mucho, depende del género, del grupo o cantante. Antes los artistas iban mucho a la televisión, había muchos que dependían de la pantalla. Los espacios en la TV se ha limitado, este medio ha tomado muchas medidas en cuanto a sus formatos; muy respetables sus decisiones, pero bueno, nuestra audiencia no busca ver a sus artistas en ese medio, ellos buscan el tema de la inmediatez y lo hacen en las redes digitales. La TV dejó de ser un medio atractivo, no buscamos ese tema tanto como antes.
¿Y cómo percibes a la radio?
Este medio tiene un reto muy grande, la competencia directa es Spotify; los chavales, la población más joven, no está tan pegada como antes a la radio. Pero eso sí, yo lo que veo es que están enfrentado el desafío muy bien, se reinventan y se reinventan, lo hacen bastante bien y, en México al menos, la radio tiene un gran nivel que hace que los artistas sigan muy interesados en tener presencia en el medio.
