Tan es cierto que el amor es ciego que dicen por allí que las relaciones amorosas inician en los parques y concluyen en los juzgados. Grupo Radio Centro, que ha sido una de las empresas más fuertes en radiodifusión en México y los Estados Unidos, comenzó en los años noventa un enamoramiento con la empresa de la familia Serna llamada Radio Programas de México, específicamente con el noticiario Monitor que conducía José Gutiérrez Vivó; el enamoramiento llevó a casorio y en 1998, ya con el nombre Monitor, la empresa que encabezó desde entonces Pepe Gutiérrez se comprometió a trabajar en un enroque comercial que aunaba las emisoras Radio Red AM y FM con las emisoras del consorcio de la familia Aguirre.
Ya dije que uno se enamora a ciegas, y pues allí mutuamente se ofrecen todo: amor eterno, casa, co, garcheaje y todo lo demas… Así fue lo que sucedió entre el comunicador José Gutiérrez Vivó y los hermanos Aguirre Gómez. De acuerdo con los primeros convenidos entre ambas empresas, este idilio comercial debía generar frutos comerciales hasta el año 2015; sin embargo, muy pronto, desde los primeros años de la década del 2000, vino el desencanto: lo terrible no ha sido que dos empresas de radiodifusión internacional se liaran con tanta vehemencia, lo terrible es que han llevado a un proceso laaargo de ruptura que llevó a que las cortes internacionales intervinieran para poder identificar entre Monitor y Radio Centro a quién asistía la razón.
En 2004, uno de los momentos políticos más fuertes del país, y cuando más se asociaba a Gutiérrez Vivó con políticos como Andrés Manuel López Obrador, Radio Red se negó a seguir emitiendo las señales de Monitor… todavía entonces se buscaba la reconciliación entre ambas empresas; sin embargo, los gobiernos panistas, particularmente el de Vicente Fox, no la pasó tan bien con Gutiérrez Vivó.
En fin, muchos de los hechos de esta historia son ya muy conocidos, y muchos recordamos vivencias heroicas del equipo de reporteros y conductores de Monitor quienes, literal, dejaron la salud, la familia y hasta la vida por defender el proyecto llamado Monitor, como se ha defendido ahora a Carmen Aristegui… La gran diferencia es que en el año 2012, “haiga sido como haiga sido”, el cuerpo creativo de Monitor entró en huelga y Gutiérrez Vivó se fue a los Estados Unidos a librar una batalla legal que, a su parecer, era resultado de una injusticia de sus socios de Radio Centro.
Esta historia, luego de nueve años de querellas legales, llegó a su fin: tanto la corte internacional como los jueces mexicanos determinaron el incumplimiento y ruptura comercial injustificada de parte de José Gutiérrez Vivó, y otorgaron una sentencia inapelable que obligará a que éste solvente con 757 millones de pesos a sus exsocios en Radio Centro.
Hoy las autoridades de Radio Centro se han reservado de dar entrevista directa al respecto, pero se manifiestan en la certeza de que termina ya este ciclo que ha sido tan polémico, y aún no sabemos si buscarán la recuperación de XENET (13-20 AM), pues XEINFO (1560 de AM) pasó a transmitir desde 2011 música mexicana cuando Gutiérrez se la otorgó a Eduardo Henkel Rojas, por el pago de un adeudo contraído por parte de INFORED.
Radio Centro se sigue contrayendo –aunque a mí me late que será como el proceso de las crisálidas–, se está metiendo al caparazón, aparentemente achicándose, pero en muy poco tiempo, digo yo, podría darnos alguna sorpresa de cambio de contenidos. José Gutiérrez Vivó en este recuento de los daños aún enfrenta disputas legales con sus trabajadores en INFORED, quienes incluso se han muerto esperando el cumplimiento de los pagos de sus servicios.
Creo que es cierto que el pasaje INFORED vs. Radio Centro es unos de los más dolorosos procesos de alcance social, económico y político en México, pues no sólo existió la represión editorial, sino vuelcos entre ambas empresas que han dañado tanto a los trabajadores como a la sociedad misma.
Fuerte este proceso, y ahora ha llegado a su fin, al menos para Radio Centro… ¡Bueno eso, eso digo yo!
