Dices que la radio es tu pasión, ¿podrías describir ese sentimiento?
La magia de estar en una cabina sola pero a la vez compartiendo historias con mucha gente, es como estar en una cadena de amor. Puedes escuchar una canción en tu celular muchas veces, pero si la escuchas en la radio sabes que tal vez esa misma canción la puede estar escuchando alguien que te importa y que tú seas para el radioescucha esa conexión con la persona importante es muy satisfactorio
Ahora la imagen manda, aunque estés en la radio… ¿te consideras sexy?
No debería ser la prioridad de una locutora, ya que hay una línea muy delgada en estar ahí por como luces o por lo que haces. Hoy en día las estaciones buscan imagen y voz , pero es un terreno complicado, ya que la belleza con el tiempo cambia y vas perdiendo vigencia y con talento es más fácil tener permanencia.
¿El locutor debe llevar su estilo a la estación que llega o adaptarse, qué piensas?
Creo que el estilo del locutor es lo que lo hace diferente, es por lo que la gente te escucha o permite que lo acompañes en sus actividades, sin embargo en ocasiones puedes hacer adaptaciones dependiendo de la estación o el formato, pero sin perder tu esencia.
¿De dónde vino ese sobrenombre tan travieso?
Cuando decidí dejar mi casa en Morelos para incursionar en Puebla, llegue a La Mejor 1250 AM y era la más joven de la plantilla de locutores. Y como siempre he sido muy “despapayosa” y les hacía travesuras a mis compañeros, ellos decidieron llamarme Traviesa y optamos por usarlo al aire también.
Leí que te gusta de todo menos el heavy metal…
La verdad no sé, pero es muy intenso, no sé si es el ritmo, la intensidad, no lo sé, no me late…
Hay locutores a los que se le sube la fama a al cabeza, ¿qué opinas?
Lo importante es que no perder la cercanía con la gente, ellos son los que te permiten estar al aire y hacen que tu trabajo sea más fácil, es divertido que te sientan parte de su vida. No tengo queja de mis hermosos radioescuchas, son la neta.