¿Es indispensable comprar una computadora nueva para editar el mejor audio? La realidad es que no, es más, la que tienes de sirve para más de lo que imaginas, sólo necesitará algunas adecuaciones básicas que requieren una inversión menor a la de un equipo nuevo.
Vamos por partes, lo primero que necesitas es mejorar el RAM.
Los programas para editar audio digital utilizan mucha memoria RAM. Si usas Adobe Audition para editar, verás que 4 GB son más que suficientes, pero con el paso del tiempo notarás que los recursos empiezan a mermar el rendimiento de tu estación de trabajo. No dudes aumentar a 8 o 16 GB la memoria de tu computadora personal, en especial si usas Windows 10.
Guarda tus grabaciones en un disco duro externo.
Por mera costumbre o inercia, guardamos cualquier cosa en el disco duro de nuestra laptop o PC. Si bien es una idea lógica, lo ideal es tener una memoria USB 3.0 o un disco duro para grabar todos nuestros archivos. Esto ahorra espacio y ayuda al sistema a concentrarse en el software solamente. Verás los resultados de inmediato.
Lo que sí debes tomar en cuenta es que los dispositivos que uses para grabar deben ser de calidad y veloces. Por eso señalamos una memoria flash USB 3.0 o un disco duro externo, mínimo, 2.0.
Cambia los discos duros convencionales por unos de estado sólido.
De todos los gastos, este será el más pesado, en especial porque los discos de estado sólido no han bajado de precio. A cambio obtendrás velocidad y mucho menos ruido.
Lo primero que notarás es que todos tus programas abrirán más rápido y que la velocidad de guardado es superior a la de un disco mecánico.
¿Qué clase de resultados podrás tener?
Realiza las tareas más descabelladas. Abre Pro Tools y edita más de 50 tracks al mismo tiempo. Verás que tu maquina trabajará como si nada.
Toma en cuenta lo siguiente:
Cuando trabajes, sólo dedícate a eso. No tengas otros programas abiertos. Mantén corriendo lo necesario para que el rendimiento de la maquina sea el mejor. No porque tengas los recursos de hardware debes creer que ahora eres un dios que puede dominar cuanto programa esté abierto en Windows 10.
Haz que dure ese equipo que costó mucho dinero. Dale mantenimiento, borra lo que no necesites y mantén actualizados todos los programas y controladores. Verás que así, tendrás una vida llena de felicidad a la hora de editar.
