Háblenos de su proyecto, por favor.
Tenemos contenidos que la radio puede descargar, noticias, deportes, futbol. Tenemos también programas para los fines de semana, música de Lupillo Rivera; tenemos gran cantidad de contenidos y queremos que los programadores puedan aprovechar todo eso. Yo resido en Los Ángeles, pero trabajamos en todo Estados Unidos.
¿Cómo se encuentra su servicio?
Nosotros solemos marcarles a algunos programadores e informarles que estamos sacando algo nuevo. Estamos preguntándoles que les gusta, que necesitan, porque trabajamos con requerimientos específicos. Hay veces que hemos creado contenidos para una sola estación, no importa si el mercado es pequeño o grande, si alguien nos pide algo, nosotros lo tenemos.
El gusto del público es cada vez más variado…
Lo que trabajamos es genérico. Tenemos muchas estaciones con formato cristiano, pop, de noticias. Tenemos talento de México y de Estados Unidos, se mezclan y son buena combinación.
¿Cómo es trabajar con radios cristianas?
La radio cristiana tiene cierto estándar de contenidos, pero lo que es la noticia y el deporte son de interés general, no discrimina a los cristianos; ellos también quieren estar informados.
¿Cómo detectar el gusto delos jóvenes?
Nosotros trabajamos más con las necesidades de las estaciones, ellas son las que tienen que identificar las necesidades de su mercado e informarnos a nosotros para crear ese contenido para ellos.
¿No han hecho todavía algún trabajo para México?
Aun no, aunque tenemos clientes. Por ejemplo, El show de Alex Lucas, en el Bajío, el cual se transmite con bastante éxito desde Salinas, California. Tenemos un número 800 a la que la gente llama y le contestan. Con bastante éxito lo hemos hecho y sí nos gustaría tener más presencia. No hay un impedimento para crecer, hay gente que trabaja con nosotros desde este país.
¿Considera que debe tener más comunicación para que este mercado se refuerce?
México es un mercado con mucho talento, hacen radio de forma excelente. Ojalá que nos dieran la oportunidad a nosotros que estamos fuera de él.