Con sólo analizar tus hábitos dentro de la plataforma, Spotify puede saber dónde vives y hasta tus preferencias políticas.
Todos los sitios, aplicaciones, redes sociales e incluso los mismos exploradores, recolectan diversos datos del usuario —a veces sin que ellos lo noten— para realizar una serie de elecciones que se ajusten a su personalidad.
Spotify no es la excepción, y si alguna vez te sorprendiste porque la recomendación que te hizo la plataforma te gustó de inmediato, es porque los códigos y la inteligencia artificial de la plataforma te conocen más de lo que crees.
No sólo se trata de rastrear las canciones que reproduces diariamente, sino de analizar la información con base en estadísticas generales, estudios del comportamiento, lo que se escribe en otros medios sobre determinados géneros musicales.
Gracias a estos estudios, se pueden hacer perfiles aproximados de los usuarios, que van desde datos fidedignos como su localización hasta sus posibles preferencias políticas o estado de ánimo.
Si bien hasta ahora sólo se han logrado develar matices del carácter de los usuarios, los investigadores están orientando sus esfuerzos para hacer más fiables los motores predictivos y otorgarles a sus usuarios mayor satisfacción al momento de interactuar con la plataforma.
Yeni Rueda