La compañía va cuesta abajo y sus indicadores no son favorables.
El servicio de radio por internet tiene problemas financieros. Su más reciente ejercicio operacional arrojó 250 mil dólares de pérdidas. Y por otro lado va perdiendo suscriptores y tampoco amplía su presencia a otras partes del mundo, como ya la tienen otros servicios.
Mientras tanto, Spotify va ganando nuevos suscriptores en Estados Unidos. Si bien sus cifras de publicidad han aumentado un 7% a 273 millones de dólares, el número de suscriptores ha disminuido.
¿Cuáles pueden ser las razones de estas pérdidas?
La respuesta está en las nuevas apuestas sonoras que otras compañías hacen ofreciendo servicios y beneficios a menores costos y justamente con más opciones, catálogos y funciones.
En este mundo digital, quien no arriesga, no gana. Y quien no ofrece más, pierde mucho.
José E. Plata M.