El cantante mexicano inicia una nueva etapa en esta ciudad, de la cual estuvo vetado por cuestiones ajenas a él. Promete que volverá cada vez que pueda.
El próximo 15 de octubre, Pepe Aguilar se presentará en el Rosemont Theatre frente a un público siempre fiel al estilo particular del cantante ranchero. Pero no va solo, lo acompañan sus hijos Leonardo y Ángela, de quienes se espera que inicien pronto su propio camino en la industria musical.
Aguilar expuso que uno de sus mayores propósitos es nutrir a su público y por eso renueva constantemente sus espectáculos, y que más allá de las cuestiones financieras o de promoción de un artista lo esencial son las presentaciones en vivo, en donde el artista se conecta con sus fans.
Para Pepe Aguilar, la música mexicana no peligra, en todo caso pasa por una crisis que les da la oportunidad a los artistas de renovarse y encontrar nuevas vías de trabajo, acercarse a nuevos oyentes y fomentar el género entre las nuevas generaciones.
Por Yeni Rueda
