Revelan cómo los ricos y los pobres viven la felicidad de diferentes modos
Quienes ganan más experimentan emociones centradas en sí mismos, como satisfacción y orgullo, además de diversión. Por su parte, las personas con ingresos bajos se solían centrar en otras personas, con sentimientos como compasión y amor, mientras que el mundo que los rodea les provocaba temor e inquietud.