Streep dijo que se sintió sorprendida el año pasado por una «actuación», que fue una clara referencia —aunque sin decir nombres— a la burla de Donald Trump al periodista con discapacidad Serge Kovaleski, del New York Times. «No fue una buena actuación, pero cumplió su trabajo. Fue el momento en que la persona que va a tener el puesto más respetado del país imitó a un reportero con discapacidad. Alguien a quien superaba en términos de privilegios, poder y capacidad para responder», dijo.
«Me rompió el corazón cuando la vi, y aún no me la puedo quitar de la cabeza porque no era en una película, era la vida real. El instinto de humillar —cuando está modelado por alguien con una plataforma pública, alguien poderoso— es algo que se filtra en la vida de todo el mundo porque da permiso a otros a hacer lo mismo».
«El irrespeto invita al irrespeto, la violencia incita la violencia», concluyó.