¿Has dado una declaración desafortunada en la que de pronto te comienza a llover odio en redes sociales? Si has pasado por esto y no sabes si debes dar la cara o simplemente callar ante el hecho, a continuación te contamos qué hacer:
Cuando SÍ deberías dar declaraciones:
- Cuando hay una mala conducta clara
Saber reconocer los errores es de grandes. Si detectas que no actuaste bien, discúlpate.
- Cuando hay malinterpretación de declaraciones
Aclara lo que realmente trataste de decir. Asegúrate que tu aclaración no te hunda más.
- Cuando vas a hacer algo para subsanar el hecho
Las acciones correctivas son muy bien tomadas por la gente. Esto comunica que no te quedaste en el error, sino que aprendiste de él y además estás haciendo algo para mejorar.
- En una situación cubierta por muchos medios
No ignores una crisis, esto puede desatar rumores y especulaciones. Sé tú quien controle la narrativa.
Cuando NO deberías dar declaraciones:
- Cuando hay un asunto legal de por medio
¡Ojo! Todo lo que digas puede ser usado en tu contra.
- Cuando el asunto es tan malo que dar una declaración podría empeorarlo
A veces es mejor esperar a que se calmen las aguas.
- Cuando quieres arreglar las cosas al momento
Dar una declaración apresurada y desinformada podría hacer que todo se empeore.
¡Mucho ojo! Como dice el dicho, “El pez por su propia boca muere”; se amo y no esclavo de tus palabras.