No muy buenas noticias llegaron a la Amplitud Modulada del Valle de México, ya que recientemente a través del diario El Economista, con base en mediciones realizadas por la casa INRA, se informó que las siete emisoras musicales con mayor popularidad en esta banda presentaron un descenso acumulado de 19.73% en sus audiencias en el periodo comprendido de enero a abril del 2023.
Las siete emisoras de las cuales se habla son: La B Grande de México, Radio Felicidad, La Comadre, El Fonógrafo 690 AM, Stereo Cien, Sabrosita 590 AM y Bandolera 1410 AM.
Según los reportes de INRA, estas siete emisoras en conjunto lograron una audiencia acumulada de 3.40 millones de oyentes entre enero y abril del 2022, y 2.73 millones de radioescuchas en el mismo periodo, pero del 2023, lo cual nos habla de un decrecimiento importante. Estas frecuencias, a pesar de estar operando en AM y de ofrecer programación de larga data, habían venido presentando crecimientos continuos, sin embargo, este año no ha sido el mejor para los conceptos radiales.
El diario El Economista reportó que estos decrecimientos se dieron por la redefinición de la programación de las emisoras, los cambios conceptuales y la pérdida de identidad.
También se realizó un comparativo sólo de abril 2022 con abril 2023 y no a todas las emisoras les fue mal, por ejemplo, La B Grande tuvo un crecimiento de 20.57 % de audiencia, mientras que Radio Felicidad creció 7.81 %; por su parte La Comadre creció 148 % y Stereo Cien AM en 35.05 %.
En contraparte, y también comparando sólo abril 2022 con abril 2023 Bandolera 1410 que ahora se llama Sabrosita 1410 perdió 72.54 % de audiencia, mientras que Sabrosita 590 AM (conceptos iguales, pero en diferentes frecuencias en el dial), perdió 4.11 % de sus oyentes. Mientras tanto, El Fonógrafo perdió 33.10 % de sus oyentes.
Stereo Cien AM por su parte ahora cuenta con 127,000 oyentes acumulados en abril de este año, lo cual significó un crecimiento desde los 94,000 que tenía en abril del 2022.
Esta nota fue realizada con base en un artículo publicado por Nicolán Lucas-Bartolo a través de El Economista.
