“Hola, buenas tardes
De parte de XXXXXX, quiero agradecer tu interés y el tiempo que empleaste para este proceso.
Tuve la grata oportunidad de conocerte, platicar contigo y me compartieras las actividades que llevas a cabo en tu vida y aquello en lo que te gustaría desarrollarte y te apasiona.
Te informo que desafortunadamente el área de estudios considera tu perfil incompatible con la experiencia que desean, por lo que solicito tu autorización para mantener tu información en nuestra base de datos para futuras oportunidades en otra área.
En cuanto exista alguna otra posibilidad, te contactaré para plantearte la vacante.
XXXXXX te invita a que continúes con tu buena actitud y disposición en futuras oportunidades.
Saludos”
Hace unos días recibí esta comunicación de parte del área jurídica y de capital humano de una prestigiosa empresa de radio de México. Es la respuesta a una solicitud, enviada por mí, para aplicar al cargo de ‘Coordinador de producción y programación’.
En la convocatoria describían las siguientes actividades a realizar:
- Coordinar las actividades de operadores de cabina, grabadores, continuistas, locutores y productores.
- Producción de radio.
- Activaciones de campo.
- Apoyo de creación de estrategias de promoción.
- Manejo de equipos de transmisión y grabación.
Sobra decir que estas han sido muchas de las actividades que he realizado en mis casi 50 años de trabajo en radio y en las que he obtenido logros importantes, no solo en las más grandes empresas de radio de mi país sino en otros países donde he trabajado.
¿Pero, por qué apliqué para ese cargo?
Yo ya estoy retirado, disfrutando de mi jubilación. Tengo 69 años y vivo tranquilamente en la Riviera Maya mexicana, frente al mar Caribe. Podría estar viviendo el sueño de muchas personas.
Lo primero que uno piensa cuando habla de la jubilación es en hacer lo que hice yo: irse a vivir junto al mar, levantarse tarde e irse a la playa con un cóctel margarita en la mano, tomar el sol, escuchar música, contemplar los bikinis y no hacer absolutamente nada más.
Y eso fue lo que hice acá el primer mes.
Sin embargo, luego de una rutina de tantos años, uno no quiere sentirse inútil. Siente que todavía tiene mucho por entregar y aprender, y si es posible, enseñar a partir de las experiencias, buenas y malas, que haya vivido.
De hecho, por eso escribo estos artículos de radioNOTAS.
Pero, además de estar activo y siendo útil, era la oportunidad de estar metido “en mi salsa”, en ese placer inmenso que da el trabajar en una emisora, estar mirando la programación, escuchar la música, ver en acción a los locutores, estar en una transmisión en vivo desde la calle, coordinar un evento, en pocas palabras, hacer radio.
Finalmente, vi que esa empresa advierte textualmente que en todos sus procesos de reclutamiento “no se discrimina por motivos de raza, religión, orientación sexual, condición física o socioeconómica ni por ningún otro motivo”, así que supuse que mi avanzada edad no sería un impedimento.
Al ver esa convocatoria en LinkledIn me dije, “¿por qué no aplicar?”.
El proceso
Antes de aplicar para el cargo me puse a investigar acerca de la empresa. Hice varias búsquedas en internet; entré a su portal; miré su perfil en LinkedIn; busqué estudios de audiencia para conocer el desempeño de la emisora en cuestión; la escuché un par de días seguidos, aunque ya la conocía; miré su manejo de redes sociales; revisé el tipo de eventos y actividades que realizaban; investigué acerca del mercado o ciudad y profundicé en el conocimiento de la casa matriz.
La idea era llegar muy preparado a cualquier entrevista.
Y aunque pensé que el proceso sería muy sencillo, teniendo en cuenta las exigencias del cargo al que aplicaba, la verdad es que me llevé una gran sorpresa.
Yo he pasado por varios procesos de contratación a lo largo de mi vida, aunque solo trabajé en 4 o 5 grandes empresas. Sin embargo, no me esperaba ver la cantidad de requisitos que había que llenar para postularse a este cargo que, en radio, tiene un cierto grado de responsabilidad, pero que tampoco es que sea una vicepresidencia o algo por el estilo.
El proceso fue así:
- Entrevista inicial con el responsable del área jurídica y de capital humano. Aquí me hicieron las preguntas tradicionales: cómo me enteré de la convocatoria; por qué quiero aplicar al puesto; por qué creo ser la persona indicada; cuál ha sido mi experiencia en radio y en cargos similares.
- Luego de ese primer filtro me enviaron un cuestionario que constaba de dos partes, la primera consiste en información técnica y la segunda para evaluar mi potencial creativo.
En la primera me preguntaron acerca de mi conocimiento acerca de las funciones que he realizado, de mis habilidades en manejo de softwares de edición de audio y video, qué hacer cuando un locutor comete una falta grave y cosas por el estilo.
En la segunda parte, las preguntas iban más enfocadas al trabajo de campo y la promoción de la emisora, así como al manejo del personal en las calles.
Aquí ya entendí que se trataba de un trabajo más operativo que creativo, en el que probablemente no podría aportar mi experiencia de producción y programación, pues según entendí, esto es manejado desde la capital del país.
- Después de haber enviado las respuestas a las preguntas solicitadas, vino la parte más seria del proceso. Debería realizar unas pruebas o evaluaciones mediante una aplicación o software de reclutamiento.
Esas pruebas consistían en una serie de exámenes psicométricos, evaluación de desempeño y experiencia o manejo frente al clima y el desarrollo organizacional, compuestas por 5 cuestionarios.
Los cuestionarios, que solo estaban disponibles por 24 horas en la red luego de haber sido recibida la invitación, eran los siguientes:
-
- Cuestionario de Valores y Motivaciones para mexicanos (soy residente permanente)
- Estudio de Habilidades Intelectuales (Terman Merrill)
- Evaluación de los 16 factores típicos de la Personalidad
- Evaluación de los Estilos de Manejo del Conflicto
- Técnica DISC
Algunos de estos cuestionarios había que responderlos en pocos minutos y era posible que no alcanzara a terminarlos, pues al cumplirse el tiempo se cerraban.
- Finalmente, y luego de realizar esas pruebas, fui llamado para realizar una entrevista final con el posible equipo de trabajo, que incluía a la gerente local y a dos directivos de la cadena en CDMX.
Esta entrevista fue muy parecida a la que presenté inicialmente, aunque mucho más corta. Ellos ya habían tenido tiempo de leer mi hoja de vida o currículo, mis respuestas al cuestionario técnico y creativo, aunque dudo que hayan tenido tiempo de leer los resultados de las últimas pruebas sicométricas, ya que las terminé tan solo 1 hora antes de la entrevista.
Al final, y en solo un par de días, recibí el mensaje con el que comienzo este artículo y en el que me decían que el área de estudios consideraba mi perfil incompatible con la experiencia que deseaban.
¿Mi reacción?
Cualquiera que aplique a un cargo, cualquiera que sea el motivo por el que se haya presentado, aspira a pasar las evaluaciones, y yo no las pasé.
¿Me sentí mal? ¿Me desilusioné?
Admito que sí me hubiera gustado realizar este trabajo, regresar a la radio, estar en medio del agite normal de una emisora, pertenecer a una gran empresa de radio, disfrutar de la música, vivir una transmisión remota o un evento, estar en contacto con el público y, quien quita, de pronto hasta tener mi propio programa…
Es decir, lo que tanto disfruté en mis casi 50 años de hacer radio.
Por otro lado, debo confesar que el dinero que pagaban no me alcanzaría para relocalizarme en la otra ciudad que, en carro, queda a hora y media de mi casa. En caso de salir elegido, seguramente les hubiera exigido un salario de al menos el doble de lo que ofrecían para mudarme y mantener un estilo de vida similar al actual
Pero también pensé que era justo abrirle el espacio a gente nueva, joven, que se está abriendo camino y que quiere salir adelante con sus aportes y con una visión, seguramente, más joven y actual.
Creo que habrá mucha gente que podría pensar: “ese señor ya pasó por todos los cargos de la radio. Ya trabajó y se pensionó gracias a la radio. Ya es hora de que les abra espacio a las nuevas generaciones”. Y si alguien piensa así, tiene razón.
Perdón… ¡yo solo quería divertirme!
Aprendizajes
Es la primera vez que me rechazan al postularme para un cargo. ¿Es una derrota? ¿Debo rendirme?
En mi caso particular, esto me ha servido para entender que, como lo dije arriba, lo que para mí podría ser simple diversión, para otra persona podría representar un avance en su carrera o, simplemente, la posibilidad de mejorar su condición económica, y yo no debería interponerme.
Por otro lado, y a manera de autoconsuelo, podría imaginar que ellos pensaron que yo estaba sobrecalificado para el puesto, aunque también puede ser que, simplemente, yo ya no estaba apto para ese trabajo, no cumplía con sus expectativas o me fue mal en las evaluaciones.
Por ahora, seguiré escuchando esa emisora, que me encanta y me parece muy bien producida, con una excelente programación musical y con muy buenos talentos al aire, y continuaré aprendiendo de radio y compartiendo mis experiencias con ustedes, mis lectores.
¿Y qué me quedó de todo este proceso?
Cada experiencia deja una enseñanza, y por eso ahora quisiera dejar unas recomendaciones para cuando se vayan a postular para un puesto, y también quiero dejarles otros consejos en caso de que no sean aceptados al aplicar a un cargo.
14 recomendaciones para una entrevista de trabajo en una empresa de radio
- Investigue la empresa y el puesto al que se postula. Esto le ayudará a prepararse mejor para las preguntas que le harán y a demostrar que está realmente interesado en el trabajo.
- Llegue puntual a la entrevista. Esto demuestra que es respetuoso con el tiempo de las personas y que se toma en serio el proceso de selección. Esto aplica también si la entrevista es por internet.
- Vista profesionalmente. La primera impresión es importante, así que asegúrese de vestirse de manera que proyecte una imagen profesional.
- Sea cortés y educado. Salude a su entrevistador con un apretón de manos firme y haga contacto visual. Lo mismo si es en cámaras de video.
- Responda a las preguntas con claridad y concisión. Evite dar rodeos o divagar.
- Si tiene experiencia en radio, asegúrese de destacarla durante la entrevista.
- Si no tiene experiencia en radio, pero está interesado en el trabajo, prepárese para hablar sobre sus habilidades y experiencia que sean relevantes para el puesto.
- Sea creativo y original en sus respuestas. Esto le ayudará a destacar entre los demás candidatos.
- Sea honesto sobre sus habilidades y experiencia. No intente ser alguien que no es.
- Haga preguntas al entrevistador. Esto demuestra que está interesado en el trabajo y que quiere saber más sobre la empresa.
- Sea positivo y entusiasta. Muestre su interés en el trabajo y en la empresa.
- Envíe una carta o un correo de agradecimiento después de la entrevista. Esto demuestra que está agradecido por la oportunidad y que está interesado en el puesto.
- Sea paciente. El proceso de selección puede llevar tiempo, así que no se desanime si no recibe una respuesta de inmediato.
- Sea usted mismo y deje que su personalidad brille. Esto le ayudará a crear una conexión con el entrevistador.
10 consejos de cómo reaccionar si no fue escogido para el puesto
Por otro lado, es normal sentirse decepcionado si no es aceptado para un cargo al que aplicó. Sin embargo, es importante no tomarlo personalmente. Hay muchas razones por las que puede no haber sido seleccionado, y no siempre es una indicación de sus habilidades o experiencia.
Aquí hay algunas cosas que puede hacer para lidiar con la decepción y aprender de la experiencia:
- No importa sentirse triste o decepcionado. No es el fin del mundo ni es necesario reprimir sus emociones. Permitir sentirlas le ayudará a superarlas más rápidamente.
- Analice la experiencia. ¿Qué podría haber hecho mejor? ¿Qué aprendió de la entrevista?
- Actualice su currículum y carta de presentación. Si no fue seleccionado, es posible que deba actualizarlos para reflejar sus habilidades y experiencia más recientes.
- Siga buscando trabajo. No se desanime si no encuentra un trabajo de inmediato. Siga buscando y eventualmente encontrará el trabajo adecuado.
- No se desanime. No todos los trabajos son para usted, y eso está bien. Siga buscando y eventualmente encontrará el trabajo adecuado.
- Aprenda de sus experiencias. Cada experiencia laboral es una oportunidad de aprender y crecer. Reflexione sobre sus experiencias anteriores para identificar áreas en las que puede mejorar.
- Sea persistente. La búsqueda de trabajo puede ser difícil, pero es importante ser persistente. No se rinda hasta encontrar el trabajo adecuado para usted.
Conclusión
Aquí estoy, esperando a que me llamen a una entrevista para alguna vicepresidencia… ja, ja, ja. ¡Mentiras! Estoy muy contento de haber pasado por este proceso. Aunque no fui elegido tuve un nuevo aprendizaje que me hizo reflexionar acerca de mis intenciones que podrían quitarle un puesto a alguien que lo necesite más que yo.
Y, por otro lado, me permitió compartir con ustedes este proceso al que, seguramente, se verán enfrentados en algún momento, ojalá cercano y exitoso.