Si usted es un programador de una emisora musical, probablemente piensa que lo más importante es escoger buenas canciones. Y, en parte, tiene razón. Una emisora que no toque canciones buenas está destinada al fracaso.
Pero ahí no radica el secreto. De hecho, eso es lo que hacen muchas emisoras online, y por eso no funcionan. Sus programadores creen que sacar una playlist de solo éxitos le va a garantizar una audiencia masiva inmediata.
En realidad, el orden en que usted programe esas canciones es igual de importante, ya que la programación de música combina ciencia y arte.
Y cuando hablo de ‘orden’ no me refiero únicamente a la ubicación de sus categorías (o ‘carpetas’, como las llaman algunos), sino a la curva musical, al estado de ánimo que reflejan las canciones, el número de veces que suena cada tema, cómo están acompañadas esas canciones, cómo separar los artistas de sí mismos y muchos otros detalles.
Ese cuidado a la hora de programar es lo que distingue a un programador profesional de uno aficionado.
A continuación, expongo algunas de las situaciones críticas que debo tener en cuenta a la hora de programar para evitar que las canciones se repitan demasiado y cansen al oyente; evitar que dos o más canciones de un artista se reproduzcan demasiado cerca o al mismo tiempo que ayer.
Asegúrese de que cada cuarto de hora tenga un sonido consistente, que represente el sonido de la estación. Evite que haya ‘empates’ de canciones muy fuertes con canciones demasiado blandas. Trate de tener una consistencia en la programación musical, con un sonido claro que sea fácil de entender y que muestre una diferencia en comparación con otras estaciones.
Profundicemos en cada punto:
- Choque de trenes:
Los «choques de trenes» se refieren a situaciones en las que dos canciones chocan o no fluyen bien juntas cuando se reproducen consecutivamente. Para evitar esto, se debe prestar especial atención a las transiciones entre canciones.
Preste atención a factores como el ritmo, la clave, el género y el estado de ánimo general para crear transiciones perfectas y mantener una experiencia auditiva agradable.
Por ejemplo, si usted califica cada canción de 1 a 5, donde 1 representa una canción muy lenta y 5 una canción muy rápida, procure nunca empatar o pegar una canción 5 seguida de una canción con ritmo 1. Ese es un típico ‘choque de trenes’.
Igual, no pegue un merengue muy acelerado con una ranchera, un rock muy pesado con una balada en inglés, un reggaetón de Wisin & Yandel con una balada de Alejandro Sanz.
2. Balance: música actual y recurrente:
Lograr un equilibrio entre los éxitos actuales y las canciones recurrentes de su universo musical es fundamental. Si bien es crucial mantenerse al día con las últimas tendencias, descuidar su listado de canciones puede alejar a sus oyentes habituales que disfrutan de canciones que les suenan familiares.
Lograr el equilibrio adecuado garantiza una mezcla de canciones nuevas y familiares, que satisfacen una amplia gama de preferencias de la audiencia.
3. Balance: Cada cuarto de hora debe representar el sonido de su emisora
Cada cuarto de hora debe tener un sonido consistente que represente el sonido general de su estación. Esto significa seleccionar canciones que se alineen con el género, el estilo y el público objetivo de su emisora.
Si usted programa géneros musicales muy diferentes entre sí, procure que cada cuarto de hora los incluya a todos, o a la mayoría.
Por ejemplo, si usted programa salsa, merengue, vallenatos, música popular, rancheras y reggaetón, procure que esos sonidos queden representados en cada cuarto de hora de su programación, y evite que suenen varias salsas en un cuarto de hora y en el siguiente varias rancheras, etc.
Mantener la consistencia dentro de cada cuarto de hora ayuda a crear una experiencia auditiva coherente y refuerza la identidad de marca de su estación.
4. Enfoque musical en el público objetivo:
Comprender las preferencias musicales de su público objetivo es crucial. Al centrarse en sus gustos, usted puede seleccionar una lista de reproducción que resuene con ellos.
Considere factores como edades, sexos y niveles socioeconómicos, la ubicación geográfica y la retroalimentación de los oyentes para asegurarse de que su programación musical se alinee con los intereses y expectativas de su público objetivo.
Como sea, no deje que su gusto personal influya en la programación de su emisora. Usted debe programar para su audiencia. Si quiere poner la música que a usted le gusta, cree sus playilists en Spotify…
5. Rotaciones de las categorías:
Saber intercalar las categorías de música es clave para que las canciones roten de manera adecuada para sorprender al oyente y evitar que se canse rápidamente.
Es importante evitar reproducir demasiadas canciones de una misma categoría consecutivamente, ya que puede provocar fatiga. Esfuércese por una distribución equilibrada de categorías para mantener la variedad y satisfacer diversas preferencias musicales.
Recuerde también procurar que las categorías realmente correspondan a un sonido en particular, ya sea por su antigüedad o por el género musical que representan.
6. Protección de artista:
Recuerde que un oyente normal escucha su emisora casi siempre a la misma hora, en la misma franja. Si esa persona escucha cada día su emisora, digamos, de 10 a 11 de la mañana, y siempre escucha canciones de Camilo Sesto o de Rosalía, pensará que no hay variedad.
Para evitar que las canciones del mismo artista se reproduzcan demasiado juntas, se superpongan con las que fueron tocadas recientemente o que sonaron ayer a la misma hora, implemente reglas de protección de artistas.
Estas reglas garantizan que haya suficiente espacio entre las canciones de un mismo artista, lo que permite una experiencia auditiva más diversa y evita la insatisfacción del oyente debido a la repetición.
7. Reconciliación de lo emitido:
Este es un trabajo que muy pocos programadores realizan, y es clave para asegurar una buena rotación de las canciones y una forma de asegurar que todas las canciones suenen en algún momento.
Es normal que en cada hora sobren una o dos canciones de las que fueron programadas. Esto puede ser porque el locutor habló más tiempo del previsto, porque la tanda comercial estuvo muy larga o porque hubo alguna entrevista que no estaba planeada.
Si usted trabaja con un software de programación musical, es probable que ese software crea que las canciones que el disc-jockey dejó de transmitir al aire sí hayan sido programadas, pero en realidad no sonaron, y se afectará su rotación
Por esta razón, usted debe buscar la función de ‘reconciliación’ en su software y decirle cuáles fueron las canciones que, por el motivo que sea, no sonaron en el horario previsto. Incluso, debe registrar también las canciones que sonaron al aire y no habían sido programadas (por ejemplo, las complacencias)
Recuerde que el software de programación revisa el historial de sonadas de cada canción y lo tiene en cuenta para cuando la vaya a programar de nuevo más adelante.
Este proceso ayuda a identificar discrepancias o errores, como programación incorrecta de canciones, rotaciones faltantes o violaciones de las reglas de programación. Al conciliar regularmente el registro, usted puede mantener la integridad y precisión de su programación musical.
8. Separe canciones en ascenso y en descenso:
No junte en una misma categoría canciones que acaban de ser éxito y quiere bajarles la rotación, con canciones nuevas que usted quiere impulsar y subirles la rotación o el número de sonadas por día.
Es preferible crear una categoría para canciones conocidas que ‘bajan’ o que deben sonar menos veces al día, y crear otra categoría con canciones nuevas, frescas, a las que usted le quiere dar una rotación mayor, más exposición.
Por ejemplo, si usted tiene una categoría que solo incluye canciones de música Regional Mexicana nuevas y viejas, preferiblemente debe separar esa categoría en dos: una con canciones nuevas y otra con canciones antiguas.
De esta forma, podrá hacer que las nuevas suenen más seguido y las antiguas tengan menos exposición.
9. Rodee canciones nuevas de canciones más familiares:
Si bien tocar música nueva puede impulsar la pasión del oyente y beneficiar la imagen de su emisora como ‘lanzadiscos’, es importante incorporar bien esas canciones nuevas dentro de la programación.
Cree una categoría de canciones nuevas, pero asegúrese de que siempre quede ‘ensanduchada’ entre dos categorías de canciones muy familiares para el público. Nunca toque un éxito reciente seguido de una canción nueva. Busque canciones más viejitas y muy conocidas antes y después de esa novedad.
10. Separe sonidos marginales:
Si bien es posible enriquecer ocasionalmente la programación con sonidos diversos que se salgan de lo habitual al seleccionar la música, es crucial evitar agrupar o juntar canciones con esos sonidos raros y no habituales.
No hay que confundir a la audiencia. Difundir canciones menos convencionales a lo largo de la programación enriquece el sonido de la emisora y sorprende a la audiencia, pero juntar dos canciones ‘raras’ puede hacer que la gente no entienda de qué se trata su programación musical.
11. Cuide el ‘mood’ de la programación:
Esa palabra en inglés, ‘mood’, significa ‘ambiente’, ‘atmósfera’, ‘estado de ánimo’, y se refiere a si una canción es tranquila, alegre, energética, festiva o para lloriquear.
Algunos hablan de mantener una ‘curva musical’ con las canciones, refiriéndose a que la programación debe estar llena de altibajos: canciones que suban y bajen el estado de ánimo, que haya canciones alegres y tristes, moviendo las emociones del oyente como si fueran olas.
Una emisora que solo toca baladas tristes o una que solo pone canciones aceleradas y alegres puede cansar fácilmente al oyente. En la variedad está el placer.
12. Proyecte una imagen clara:
La creación de una imagen musical clara ayuda a que su emisora se destaque de las demás y garantiza que los oyentes puedan identificar y reconocer fácilmente su sonido distintivo.
Esto implica desarrollar una estrategia de programación que defina el género, el estilo y las características únicas de su estación. La consistencia en la entrega de esta imagen fortalece la identidad de su emisora y atrae oyentes leales.
Por ejemplo, es posible que haya varias emisoras de música Urbana en su ciudad, pero usted decide diferenciarse por tocar más clásicos del reggaetón, aquellos de inicios de los años 2000. Asegúrese de que suenen en cada cuarto de hora a lo largo del día y de la semana, de forma que ese sonido quede reflejado como una característica única de su estación.
13. Y lo principal: toque solo éxitos:
Repito esta anécdota de la vida real. Siendo director nacional de emisoras musicales de una importante cadena de radio en Colombia, una de nuestras emisoras perdió el primer lugar de sintonía en una ciudad muy importante.
Y perdió ese primer lugar frente a una estación de la competencia que tocaba el mismo género musical.
Le pedí al director que justificara esa pérdida de audiencia y que me explicara por qué la otra emisora, tocando el mismo género musical, la había superado en tan poco tiempo, y su respuesta fue:
“Es que ellos hicieron la fácil”.
Cuando le pregunté que cuál era “la fácil”, me dijo: “solo tocaron éxitos y canciones súper conocidas”.
O sea que este director estaba haciendo “la difícil”: poniendo canciones que no eran éxitos y que no eran conocidas. Por eso la gente se aburrió y encontró en la otra emisora lo que esperaban.
Puede sonar demasiado obvio, pero en la radio hay que “hacer la fácil”. Hay programadores que quieren demostrar su lado artístico y su sapiencia musical, y les da por tocar canciones que creen que son de mejor calidad que la música que suena en la actualidad, dejando de lado los éxitos.
También hay directores de programación que quieren ser reconocidos porque son los primeros en tocar una canción, y por eso lanzan temas a diestra y siniestra. Y eso al público no le importa. Eso no atrae más oyentes. Más bien, los puede espantar.
¿Alguien se acuerda hoy en día quién lanzó “Despacito”? ¿Y realmente eso le importa a un oyente?
Usted puede saber mucho de música, puede conocer todas las fases de creación, composición y producción de una canción, pero al final su trabajo en una emisora comercial es atraer a la mayor cantidad posible de oyentes. Y eso solo lo logra poniendo los éxitos. Nuevos y viejos.
Haga que un oyente pueda cantar, tararear, silbar cada canción que usted toca. Que ese oyente se sepa la letra. Que sepa quién la canta. Y que esté seguro de que la canción que sigue también la podrá cantar, tararear o silbar.
Así conseguirá el éxito.
Conclusión
Al considerar e implementar estas recomendaciones, puede mejorar su programación musical para retener la audiencia de su estación de radio por períodos más prolongados.
Una lista de reproducción bien seleccionada, la atención a los detalles en las transiciones y rotaciones, y un enfoque en las preferencias de su público objetivo contribuirán a una experiencia auditiva atractiva y agradable, lo que diferenciará a su estación de la competencia.