Durante la última década, muchas empresas de radiodifusión tradicionales se han apresurado a señalar que ya no se trata solo de radio, sino que se han transformado en empresas de medios.
Después de todo, las marcas de estaciones de radio que tienen una visión de su futuro ahora están produciendo contenido y formas de marketing que van mucho más allá de la torre y la salida del transmisor heredadas. Son más que medios unidimensionales de música y palabras habladas, que producen videos, podcasts, transmisiones y publicaciones en redes sociales que demuestran sus capacidades ampliadas para ir más allá de las antiguas fronteras.
En los comercios de la industria, muchas empresas ahora están en el proceso de informar sus resultados trimestrales. Cuando ves a fondo los comentarios y explicaciones de los directores ejecutivos y de operaciones, no puedes escapar del impacto de la tecnología y las implicaciones que tiene en las operaciones diarias de la estación.
Todas las empresas son de tecnología, pero algunas tienen mejores nichos, un crecimiento más rápido, ofertas más atractivas o precios de acciones más favorables que otras.
Y lo mismo ocurre con las empresas de radiodifusión. Cuando los ejecutivos o incluso a los gerentes intermedios mencionan: «Hemos tardado en adoptar lo digital», es una admisión de que están atrasados en gran medida porque no lograron adoptar la tecnología.
Plataformas como iHeartRadio han dominado la prensa especializada durante los últimos años, lo que subraya cómo las industrias de radio han ampliado sus horizontes. Pero con el tiempo, la historia menos publicitada es cómo algunas de las compañías de radio más competitivas están aumentando la dotación de personal profesional en el lado digital y tecnológico, construyendo y reforzando los sistemas que permiten que las marcas de las estaciones crezcan y se expandan a nuevas verticales, creando en última instancia nuevas fuentes de ingresos.
Desde la compra programática hasta el software de automatización, es la tecnología la que ahora está impulsando la industria de la radiodifusión. En un negocio que una vez estuvo definido por diarios de calificaciones de papel y lápiz, máquinas básicas y líneas de solicitud, la mayoría de las compañías de radio han realizado grandes inversiones en tecnología en los últimos años.
Y las lealtades, alianzas y asociaciones con empresas externas ( podcasting, dispositivos móviles y redes sociales) continuarán definiendo las formas en que las emisoras pueden crecer, así como convertirse en las empresas más exitosas y rentables de la industria.
El estribillo común en la radio es que el medio ha sobrevivido a numerosos desafíos. No se pasará la próxima prueba sin adoptar la tecnología.
La revolución tecnológica que estamos presenciando día con día no es una fase, un problema o un ciclo. Ahora, toda industria es una empresa de tecnología. Cuanto más rápido lo reconozcamos, mejor.
Esta nota fue realizada con base en un artículo publicado por Jacobs Media.
