La expresión ‘que el comprador tenga cuidado’ ha adquirido un nuevo significado para los anunciantes actuales y potenciales de Twitter desde el anuncio de la adquisición del sitio de redes sociales por parte de Elon Musk por 44 mil millones de dólares. La postura de libertad de expresión de Musk y su visión aparentemente antagónica de la publicidad, después de haber instado una vez a su eliminación de Twitter, en un tweet ahora eliminado, sugiere que el sitio puede convertirse en una opción menos atractiva para las marcas en el futuro.
Tal como está, Twitter, con el 90% de sus ingresos, que alcanzaron más de 5500 millones de dólares este año, impulsados por la publicidad, todavía lucha por una parte significativa del gasto mundial en publicidad digital.
Actualmente tiene una participación del 0.9%, según Insider Intelligence, mientras que los gigantes en línea Google, Meta y Amazon se combinan para tomar el 74% de ese gasto, según las cifras de Ebiquity informadas en Adweek. Twitter también va a la zaga de otras plataformas de redes sociales con la menor cantidad de usuarios en todo el mundo, la menor interacción, y las instalaciones globales de aplicaciones móviles disminuyeron un 3% con respecto al año pasado, según la firma de medición Sensor Tower.
Se espera que la transacción, aprobada el lunes 25 de abril por los accionistas y los organismos reguladores, se complete este año. La empresa debe ahora cerrar su capital, dejando de tener acciones negociadas en la bolsa.
Musk, el hombre más rico del mundo según Forbes y fundador de la empresa de tecnología aeroespacial SpaceX y del fabricante de vehículos eléctricos Tesla, ha estado abogando por una serie de modificaciones en la plataforma. Se esperan cambios en la forma en que se modera el contenido, nuevas vías de monetización, restricciones a los bots, y una mayor transparencia acerca del algoritmo utilizado por la plataforma.
Para los anunciantes, la mayoría de los cuales prefieren un entorno de medios libre de contenido incendiario, controvertido o altamente politizado, el impacto en Twitter una vez que Musk asuma el control es una gran preocupación. Las consecuencias del impulso de Musk para alentar una mayor libertad de expresión en el sitio ya están ocurriendo, con una serie de desactivaciones de seguidores que afectaron a varios de los usuarios de más alto perfil de la plataforma en los últimos días, como números para el ex presidente Barack Obama, las cantantes Katy Perry y Taylor Swift ha bajado por cientos de miles.
Al mismo tiempo, según NBC News, el total de seguidores de destacados políticos de derecha como la representante republicana Marjorie Taylor Greene aumentó en 100 mil, mientras que se especula que Musk restaurará el acceso del expresidente Donald Trump a Twitter.
Si bien Musk no ha sido exactamente el mejor amigo de la publicidad, una vez que tuiteó «el poder de las corporaciones para dictar políticas aumenta enormemente si Twitter depende del dinero de la publicidad para sobrevivir», Twitter aún necesitaría ingresos publicitarios para sobrevivir.
“El problema es que la mayoría de los consumidores aún prefieren ver anuncios a cambio de contenido gratuito, en lugar de suscribirse a un servicio digital”, dice la analista principal de Insider Intelligence, Jasmine Enberg.
Esta nota fue realizada con base en un artículo publicado por Inside Radio.