Opinión
Tiene cerca de un lustro o un poco más que he podido observar que, por decir un número, el 98% de los lanzamientos musicales que van surgiendo, se apagan a más tardar en seis meses. Este fenómeno es digno de analizarse, ya que he observado que no estamos construyendo en la industria grandes carreras dignas de algún día ser homenajeadas en recintos como Bellas Artes en México, por ejemplo.
La época fructífera en donde fueron lanzados magníficos intérpretes como Juan Gabriel, José José, Rocío Dúrcal, incluso Yuri, Mijares y algunos otros, se ha transformado por completo. Hoy por hoy pocas carreras están convirtiéndose en legados dignos de ser exaltados como orgullo nacional, lo cual es preocupante.
La industria musical ha ido cambiando las jugadas y su principal objetivo es obtener ganancias hoy, antes de preocuparse por la calidad musical, con base en cantantes que no cantan y compositores que sólo hablan de sexo. Hoy por hoy se dejó de priorizar el contenido de la música, para dar paso a la era de lo desechable, lo que hoy funciona y mañana quién sabe. ¿Será que este tipo de jugadas serían como ‘un balazo en el pie’ para las mismas disqueras?
Entrando un poco más en materia, queremos contarte que todos los negocios deben tener un plan de inversión el cual esté pensado al menos para año y medio; ninguno o realmente pocos emprendimientos suelen dar resultados favorables o retornos de inversión positivos antes de ese tiempo. Ahora, una carrera musical debe tomarse como cualquier negocio, en el cual se planifique con una agenda cuáles serán las acciones para lograr posicionar un producto en la mente del público y con qué recursos esto se logrará.
Justo aquí viene el primer gran y grave error en la industria; este negocio no está en su mejor momento económicamente, por lo que las inversiones que se prevén para lanzamiento de artistas son medianas la mayoría de las veces, con lo cual sólo se alcanza a hacer promoción hasta tres meses, tiempo que las casas de grabación le dan a un producto para ver si funciona, si este no ha logrado ser un ‘hitazo’ lo desechan, dejan de invertir en él y al poco tiempo al artista le dan su carta de retiro. No, ningún negocio funciona en el mercado de esa forma.
Lo anterior hace referencia a la industria Mainstream, sin embargo, hay una industria independiente que también está buscando sacar sus productos a flote y un porcentaje aún menor logra permanecer en el gusto del público, ¿esto por qué se da? En este caso, la mayoría de los proyectos suelen lanzarse ‘echando toda la carne al asador’, es decir, gastando todos sus recursos en promocionar uno o dos sencillos, con lo cual, el dinero se acaba pronto y la curva de declive llega aún sin ni siquiera haber despuntado el producto musical.
Para ambos casos, la mejor opción es hacer mejores planes estratégicos de inversión, y dar seguimiento a los proyectos; no se puede pretender ‘poner a prueba’ algo que ni siquiera ha llegado a una buena cantidad del público potencial que puede consumirlo.
El 2021 nos ha traído múltiples lecciones, ¿Será que en este nuevo año las casas discográficas afinen su forma de planear lanzamientos artísticos?