– ¿Te regañó mucho ayer tu mujer por quedarte un rato más a jugar cartas?
– No, no. Total estos 4 dientes me los tenía que sacar de todas formas.
– Amor, llama a los bomberos que se quema nuestra casa.
– ¡Shhhh!, silencio mi amor, no hagas ruido que vas a despertar a tu madre.
¿Cuál es el colmo de un salvavidas?… Que su hija se llame Socorro.
– Hijo, tráeme leche fría.
Le trae la leche al tiempo.
– Te pedí que me trajeras leche fría.
– Sí papá, pero la vaca no cabía en el refrigerador.
Hola, ¿está Agustín?… No estoy “incomodín”.