U na niña mexicana con parálisis cerebral que vive en Estados Unidos sin autorización desde sus 3 meses de vida podría ser deportada tras cruzar un retén de la Patrulla Fronteriza en Texas para que la operaran de emergencia de la vesícula, dijo una abogada de su familia.
Activistas en pro de los derechos de los inmigrantes manifestaron su molestia por el caso de Rosa María Hernández, de 10 años, y dicen que la Patrulla Fronteriza debería usar su criterio en casos de menores enfermos que viven sin autorización en el país pero que necesitan tratamiento médico.