La Luna se vuelve terreno interesante para el gobierno de Trump
Relegada durante la presidencia de Barack Obama, la Luna está convirtiéndose de nuevo con el gobierno de Donald Trump en un destino de interés para misiones de exploración espacial más allá de la órbita terrestre, alentando la participación del sector privado.
Aunque el mandatario estadounidense ha abordado poco este tema en público, su entorno y extrabajadores de la NASA que ahora le asesoran han confirmado su interés por volver a la Luna a través de acuerdos con compañías privadas.
El multimillonario Elon Musk, propietario de SpaceX, y Jeff Bezos, dueño de Amazon y fundador de la empresa espacial Blue Origin, ya se han entrevistado varias veces con consejeros de Trump desde su victoria electoral.
«Ciertamente vuelve a haber un nuevo interés por la Luna en la administración Trump», señaló John Logsdon, exdirector del Space Policy Institute.