Valparaíso fue un destino profesional casi obligatorios para muchos artistas mexicanos, pero con la llegada del nuevo siglo, su presencia se fue reduciendo a tal punto que el año pasado, el único participante del país, fue Marco Antonio Solís.
sumamente extraño, pues en sus distintas vertientes y estilos, la música mexicana siempre ha tenido una relación muy cercana entre sus artistas, no sólo en festivales sino en producción de placas discográficas, conciertos especiales y participación en medios de comunicación y top charts de ambas naciones.
Pero, al parecer, la ausencia mexicana en Viña del Mar llegó a su punto final, y los invitados mexicanos darán muestra del gran auge de la música romántica en Latinoamérica. Los encargados de llevar la sangre azteca al escenario chileno serán Sin Bandera, Río Roma y Camila. Pero su participación no se limitará al área performativa, ya que Mario Domm fungirá como juez de la competencia musical.