No sólo la tecnología, sino un mayor entendimiento de los procesos de competencia logrará fortalecer a la industria de las telecomunicaciones en nuestro país.
El gran reto será crear las condiciones necesarias para que todos los involucrados tengan las mismas oportunidades para alcanzar nuevos niveles de crecimiento.
La reforma de 2013 (TELECOM) hizo un par de avances en este rubro, pero es importante seguir la evolución de la misma para hacer los ajustes necesarios y que siga siendo favorecedora. Este tema no sólo es oportuno para los medios audiovisuales, sino también para el radiofónico.
Si bien gracias al Internet y los servicios streaming el campo parece haberse diversificado, en realidad sigue habiendo muy pocas opciones para el grueso de la población, quienes no siempre tienen a su alcance estas opciones alternas.
Esta limitación no sólo afecta al auditorio, sino también a las empresas productoras, que empiezan a reducir la calidad de sus proyectos ya sea por estancamiento o por la falta de recursos económicos.
Siendo México un país que recibe gran impacto de la industria de las telecomunicaciones, debe buscar otras vías estratégicas para lograr mejores condiciones, enfocadas en el aumento de la competividad, eso sí, regulada, para que las posibilidades de crecimiento y diversificación de contenidos beneficien a todos los actores de la industria nacional.
Yeni Rueda