Esta nota fue realizada con base en un artículo publicado a través del sitio web de Caracol Radio.
Con el desarrollo del internet, los medios tradicionales empezaron a tener nuevos formatos de competencia, o mejor dicho, como ahora se conoce, nuevos aliados. Fue en 2005 cuando el formato de video empezó a tener un crecimiento en internet como competencia de la televisión tradicional, gracias al lanzamiento de YouTube, convirtiéndose hasta la fecha en la plataforma más importante “sin costo” para reproducir contenidos de información o entretenimiento.
Al paso del tiempo empezaron a surgir contenidos exclusivos de video los cuales ahora se empezaron a transmitir a través de plataformas Streaming que cobran por una suscripción mensual. Tal es el caso del modelo de negocio de Netflix; empresa que por cierta cantidad permite observar series, documentales y películas de forma exclusiva, que se pueden encontrar en muy pocas plataformas.
A la par del crecimiento del video, se empezó a acuñar el Podcasts (Personal on Demand + Broadcast) como competencia de la radio tradicional, término que surgió en 2004, es decir, hace 25 años, y el cual fue propuesto por el periodista inglés Ben Hammersley, el cual publicó un artículo de audio llamado ‘Audible Revolution’, para el diario ‘The Guardian’.
Fue en el año 2006 cuando el Podcast presentó un crecimiento considerable, no obstante realmente la penetración de este reciente medio de comunicación era poca, debido a que el alcance del internet aún no era tan grande en todo el mundo.
Recientemente se ha observado un crecimiento realmente pronunciado del Podcast, en primera esto se debe a la penetración que actualmente tiene el internet y también se debe a que es un medio que se puede reproducir bajo demanda, es decir en el momento que el que escucha lo decida, puede poner play y encontrar el mismo contenido de una semana atrás o dos meses atrás.
Además que cada vez surgen nuevos productores de contenidos en Podcasts debido a que el costo de producción y distribución resulta relativamente bajo.
Los medios de comunicación tradicionales han comenzado a utilizar estas grabaciones como una forma de extender sus contenidos y también como una manera de alcanzar públicos nuevos.
