Debido a esto, un juez ha ordenado que el cantante y quienes habiten la casa la abandonen por cuestiones legales y de pago.
Y es que Luis Miguel no ha cumplido desde hace varios meses con el pago: 58 mil dólares mensuales de arrendamiento.
Hasta ahora no se emitido declaración del cantante, su manager o su oficina de prensa, sólo se sabe que dentro del inmueble aún hay algunos muebles y ropa de Luis Miguel.
No cesan los problemas para El Sol, quien parece ir en una espiral descendente, al menos en lo económico.